“Las Propiedades de los Universos en Expansión” es el título del trabajo que hoy se puede descargar en el repositorio de Acceso Abierto de Cambridge, y vuelve a tener al astrofísico en las primeras planas de todos los sitios dedicados a la información científica.
A sus 24 años, Stephen Hawking ya lograba el título de Doctor en Física Teórica del Trinity Hall en la Universidad de Cambridge. Su trabajo de graduación contiene, en su título, la naturaleza de las investigaciones que lo llevarían no solo al reconocimiento dentro del mundo especializado de las ciencias naturales, sino también al a veces polémico mundo de la divulgación científica.
Así, 51 años después, tras haber vivido y experimentado en primera mano los grandes avances de la tecnología y las comunicaciones de mitades del siglo XX hasta la actualidad, esta tesis -uno de los trabajos que marcaría el rumbo del físico teórico más reconocido del mundo después de Albert Einstein- se encuentra disponible para su descarga gratuita por medio del repositorio de Open Access (acceso abierto o acceso inmediato), Apolo, de su alma máter.
Palabras
Después de numerosas peticiones por acceder al trabajo doctoral de Hawking -quien también dictó, en 1980, la cátedra Lucasiana de Matemáticas que alguna vez impartió Isaac Newton- los directivos de la universidad inglesa decidieron celebrar la semana del acceso abierto con el anuncio de la subida y el consentimiento de Hawking de permitir que su trabajo sea de uso libro y acceso inmediato en las redes.
El Dr. Arthur Smith, Jefe Diputado de Comunicaciones Escolares, dijo que “El Acceso Abierto incentiva la investigación. Al eliminar las barreras entre las personas y el conocimiento podemos realizar nuevos descubrimientos en las áreas de la ciencia, tecnología y medicina.Es especialmente importante para diseminar el conocimiento adquirido durante los estudios de investigación doctoral. Las tesis de doctorado contienen un vasto tesoro de información inédita y única.
Por su lado, el célebre físico de Oxford se expresó contento y satisfecho de este nuevo paso en su carrera: “Cada generación se sostiene en los hombros de aquellos que han estado antes que ellos, tal como lo hice yo cuando era un joven estudiante de doctorado en Cambridge, inspirado por los trabajos de Isaac Newton, James Clerk Maxwell y Albert Einstein. Es maravilloso escuchar cuanta gente ha mostrado interés en descargar mi tesis – ¡espero que no se decepcionen ahora que finalmente tienen acceso a ella!”
Primera página de la tesis doctoral de Stephen Hawking. Derechos reservados Stephen Hawking.
Un antes y un después
Stephen Hawking presentó su tesis doctoral el 15 de octubre de 1965, cuando la esclerosis aún no había hecho estragos en las articulaciones de su cuerpo, y la antesala a las protestas generalizadas en Europa del mayo del 68 era una agitada vida cultural e intelectual propagada por todo el viejo continente, que despertaba como reacción a dos guerras mundiales, que se habían encargado de dejar a Europa devastada y con una enorme deuda, pero con un Reino Unido que gozaría de una gran revitalización social y económica en los años 50 y 60.
En ese contexto nació en la emblemáticamente académica ciudad de Oxford el físico que ha abocado su carrera a permitirnos entender un poco más de esas misteriosas regiones que conocemos como agujeros negros. En su ciudad natal, Hawking pasaría sus primeros años como niño, precisamente Inglaterra soportaba los bombardeos del régimen Nazi, y desde ahí, en 1962, viajaría hacia la otra pequeña ciudad estudiantil icónica de Inglaterra, Cambridge, justo, después de haberse graduado como matemático y físico en el University College de Oxford.
Por supuesto, el agitado y convulso contexto en el cual Hawking se desarrolló como estudiante marcó su intensa y curiosa vida intelectual, la cual, sin embargo, tuvo un feroz enemigo físico, que llegó a la vida del inglés a los 20 años, en forma de una amenaza que prometía acabar con toda su promisoria carrera en el mundo de las ciencias: la esclorisis lateral amiotrófica. Esta enfermedad degenerativa llevó a los doctores a pronosticarle escasos años de vida al veinteañero que hoy ya tiene 75 años, y ha logrado grandes avances en su campo, siendo miembro de la Royal Society, habiendo recibido numerosos doctorados honoris causa, y hasta habiendo llegado a bautizar con su apellido a un fenómeno físico: la radiación Hawking (también conocida como radiación Bekenstein-Hawking).
En este enlace puede encontrar la tesis doctoral de Stephen Hawking
