Por: María José Paternina Silva
Es un hombre alegre, sonriente, con un estilo que lo hace único en su trabajo, en su vida personal, y en todos los ámbitos; su mayor talento: relacionarse de manera peculiar y agradable. Esto lo ha ayudado a conseguir muchas cosas en la vida, oportunidades que le dieron, y le siguen dando un rumbo positivo a esta.
A la edad de 61 años es un hombre que no olvida la presentación personal. En su manera de vestir le da toques de frescura, sobriedad, alegría, Caribe, colores y vida a sus prendas. Las famosas gafas de diferentes diseños y colores son parte primordial y relevante al momento de elegir su ropa. Llevaba puesto una camisa rosada con detalles de color azul cielo, jeans, su cabello ordenado, esta vez usaba gafas cuadradas de color café acompañado de un reloj blanco y manillas que le brindaban estilo.
El cartagenero Jairo Martínez se encontraba en Telecaribe una mañana del jueves 15 de febrero. Salió del estudio de grabación al finalizar su programa “Hoy es el Día”, emitido de lunes a viernes en las horas matutinas. Se sentó en un muro ubicado cerca de la recepción de Telecaribe y muy amablemente procedió a la entrevista. “Vamos a sentarnos aquí entonces”, así se expresó de manera efusiva.
“Era tan hablador que mi mamá me decía que si ella se descuidaba me iba a encontrar hablando con el poste o con un árbol”
Toda su vida se ha caracterizado por relacionarse muy bien con las personas y tener la mejor actitud para saber tratar con ellas. Sus atributos como el carisma y la humildad resaltan a este hombre. Actualmente es relacionista público, pero el dato no viene solo, detrás de esa profesión hay razones acerca de la pasión al estudiar su carrera y desenvolverse en ella a través de los años. “Bueno, desde muy pequeño fui chacharachero, incluso salía con mis padres a cualquier lugar y mi mamá decía que si ella se descuidaba me podía encontrar hablando con el poste o con un árbol, gracias a Dios el árbol y el poste no me contestaron. Pero siempre ha sido algo que he llevado desde muy pequeño”, expresó el cartagenero con un tono gracioso y riendo.
Momentos durante la entrevista mientras Jairo, con una sonrisa en el rostro, contaba anécdotas de su vida.
Además, se involucró en eventos importantes en los que desarrolló y fortaleció sus habilidades. “Fui voluntario del Concurso Nacional de Belleza, fui voluntario del Festival de Música del Caribe y voluntario del Festival de Cine”, dijo.
Sus acciones no se limitaron en ningún momento de su vida, de cada experiencia obtenida, sus intereses en diversos campos profesionales relacionados con su carrera iban siendo evidentes desde su juventud. “Siempre me llamó mucho la atención todo lo que tenía que ver con medios, yo tenía mi colección musical, yo armaba mi propio Top 40 de los artistas que yo pensaba que para mí se merecían esas posiciones”, de esta manera dijo el cazatalentos, Jairo Martínez tuvo el privilegio de trabajar rodeado de personas importantes durante su vida y a la vez sentirse apasionado por lo que hace. “Afortunadamente gracias a Dios y a la vida tuve la oportunidad de trabajar en eso, porque no todos tenemos la gran ventaja de que lo que nos apasiona, sea por lo que nosotros estemos trabajando, y que además nos paguen bien”, agregó.
Jairo ha estado acompañado de diversas personas con las que ha creado lazos relacionales y tiene gran admiración hacia estas, así como artistas importantes en el medio. “No solamente artistas, yo admiro a personas que le aportan algo inteligente a la vida. Lógicamente, así como te puedo admirar a una Shakira, te admiro a un Federer que es un gran tenista, a un Botero que es un gran pintor; admiro a mucha a gente que tal vez anónimamente está dando mucho a la humanidad”.
Así mismo, guarda una exorbitante estima a personajes en su vida familiar que han marcado una huella importante desde muchos años. “Admiro mucho a Petra que es mi Nana en Cartagena y me ha dado su cariño toda la vida y que ha entregado su vida por estar conmigo, teniendo ella a sus propios hijos, su propia familia”.
Jairo vivió en el barrio Manga desde que era un niño, allí compartió con familia, vecinos y amigos. Estudió Publicidad en la Universidad Tadeo Lozano en Cartagena, y a la edad de 20 años, en su último año de carrera, le surge la oportunidad de realizar un intercambio estudiantil a los Estados Unidos.
Afortunadamente todo estuvo a su favor, sus padres jugaron un papel importante apoyándolo en su decisión. “En febrero de ese mismo año yo cumplía 21, entonces yo tenía la oportunidad de irme teniendo 20. Yo le dije a mis viejos: -Vamos a hacer una cosa, yo me voy este año a mi programa de intercambio porque si espero el otro año ya tendría 21 y no clasifico, entonces me voy, regreso en un año y termino la carrera”, cuenta Jairo. “Y me quedé”, agregó con tono de voz segura.
Expresó sus sentimientos al tener que irse a los Estados Unidos y lo difícil que fue para sus padres e incluso para él, también contó su actual estado en cuanto a la pausa de su carrera como publicista en Cartagena: “Para ellos fue un poco duro, y para mí también porque es el único ciclo abierto que tengo en mi vida, es más, en estos momentos estoy en conversaciones con la Tadeo Lozano para terminarla, porque es algo que lo necesito para mí, no por mi carrera ni para sobrevivir, pero para mí ese año de carrera tengo que terminarlo”.
Pasaron 35 años en los que el talentoso cartagenero estuvo en los Estados Unidos y tuvo maravillosas experiencias allá. “Siempre mi intención fue regresar a Colombia, pero ese país fue tan generoso conmigo, la carrera fue tan generosa conmigo que siempre había un motivo mejor para quedarme otro año más”, dijo.
Se mudó a Miami, y estudió en un pueblo llamado Pensacola, su carrera de relaciones públicas. “¡Yo llego a Miami y encuentro el puestazo!, aplico en el restaurante Las Tapas. Posición requerida: – ¡Gerente, manager!, -¿Usted ha sido manager de algún restaurante? –No, ¿Usted ha sido mesero? –No, – ¡Pues mijo agarre este trapito y a limpiar mesas!”. De esta manera Jairo Martínez empieza su travesía.
Sin embargo, mientras ese jovencito hacia las labores de aseo, era un poco torpe realizándolos. “Al tercer día me iban a botar porque yo era bien traste, rompí vaso, rompí pocillo, todo se me caía”, afirmó riéndose. No obstante, la esposa del dueño del restaurante veía algo diferente en Jairo, se dio cuenta que tenía potencial para otras cosas y optó por ascenderlo de puesto. “Entonces viene y me dice el dueño del restaurante: – ¿Por qué no te pones en la puerta del restaurante a recibir a todo el que llegue, hasta ver que hacemos contigo?, y ahí nació mi carrera”, comentó.
En su trayectoria en el restaurante conoció primeramente a Gloria y Emilio Estefan, Chayanne y Ángela Carrasco. Estos eran clientes fieles del restaurante y cada vez que iban eran recibidos de una manera afable por parte del peculiar “chacharachero”. “Cuando yo estaba trabajando en el restaurante todo el mundo iba a apoyarme para que yo no tirara la toalla, y así, sin querer queriendo fui armándome mi propio sistema de trabajo”, comentó riéndose.
Al igual que en el restaurante las Tapas, Jairo corría una milla más. Consiguió trabajo en una discoteca llamada Casablanca. “Yo trabajaba en el restaurante Las Tapas en el día y en Casablanca por las noches recibiendo a la gente, besándola, abrazándola, bailando”.
Posteriormente su rumbo en la carrera fue adoptando más fuerza y su acercamiento al éxito estaba próximo a presentarse. “Me fui a trabajar independiente con Emi Music y con Sony Music y ahí conocí a todos los artistas como Ricky Martin, Jennifer López, Ray Ruíz, Jerry Rivera, Azúcar Moreno, Gloria Estefan, Julio Iglesias, todos los grandes artistas que han pasado por Sony; y ahí llegó Shakira. Eso hace ya 21 años”, explicó.
Martínez recibió quejas de varios artistas debido al apego profesional con la artista. “Estando trabajando en Sony con Shakira se burlaban de mí y me decían que yo me había enshakirado, para mí no existía ningún artista que no fuera Shakira”, expresó Jairo con tono gracioso.
En el periodo de tiempo que estuvo en Sony Music decidió crear una empresa de solución de problemas llamada Yo resuelvo (I resolve). “Cada vez que había un problema en Sony decían: – ¡Hable con Jairo que él lo soluciona!, ¡si no lo soluciona Jairo, no lo hace nadie! – entonces llegó un momento en el que dije: -El día que yo me vaya de aquí voy a montar una empresa que se llame Yo resuelvo”, dijo.
Jairo fortaleció grandes lazos de amistad con Emilio Estefan y con Gloria ya que habían trabajado juntos, con Quique Santander, en un álbum Abriendo puertas, de música colombiana. Por esta razón tuvo la confianza de acercarse y contarle lo que estaba ocurriendo. “¡Emilio yo quiero que tú cojas a esta pelaita que es la próxima Madona!, entonces Emilio me dijo: -Tráela para yo conocerla- le presenté a Shakira y ahí comenzamos a trabajar todos juntos, fue cuando yo abrí mi empresa I resolve, y es la empresa con la que he trabajado muchos años con mucha gente”, comentó. Actualmente aún trabaja con esta haciendo relaciones públicas, promocionando en el mundo del entretenimiento.
Desde ese momento, la carrera de Shakira tomó otro nivel con Emilio y después se convirtió en esa gran estrella que es hoy en día, para mí es la artista más grande que existe en el mundo”, agregó Jairo.
Para Jairo, Shakira ha sido muy importante en su carrera debido a que es un ejemplo de artista debido al talento, a los valores que tiene y a las obras sociales que ha llevado a cabo. Martínez resaltó algunas cosas, que pueden tener otros artistas y personas realizando otro tipo de profesión, que tiene Shakira. “Primero, que nunca dejen su brazo torcer, que tengan perseverancia, puedo resaltar de ella todas las obras sociales que ella hace sin mucha propaganda, su compromiso con la niñez, y en la parte musical, Dios le mandó eso para que ella tenga la oportunidad de colaborarle a la niñez y a la educación de la forma que ella lo hace”.
Finalmente, pasaron 35 años en los que Jairo estuvo en Los Estados Unidos, hasta que hace 6 años atrás recibe la oportunidad de trabajar en el reconocido programa Yo me llamo por el Canal Caracol, para trabajar por dos meses. “Los dos meses se convirtieron en años y luego al tercer año me involucré en la política trabajando con la Gobernación de Bolívar con Juan Carlos Gosaín; una combinación política farandulera”, así se refirió Jairo dando a conocer su multifaceta en el medio.
Los choques en la vida son normales, y más cuando se pasa gran parte del tiempo en un lugar fijo donde se adoptan costumbres y diversas maneras de pensar. Martínez contó su cómo se sintió al volver a Colombia y quedarse trabajando acá: “Yo soy más inmediato, yo no dejo nada para mañana; aquí hay mucha impuntualidad y eso me ha dado muy duro, aquí existe mucho el importaculismo y para mí eso es fatal. Yo venía acostumbrado a una velocidad de vida que aquí me metieron un freno en seco”.
“Estoy aprendiendo no a adaptarme al sistema de acá, pero si a asimilarlo y no dejar que coja rabieta, entonces me di cuenta que después de viejo estaba cogiendo muchas rabietas y estoy todavía luchando con un sistema que es completamente diferente al que yo viví 35 años”, agregó Jairo.
Actualmente trabaja en Hoy es el Día, programa en el cual recibió la posibilidad de pertenecer desde el año 2017 y sigue emprendiendo retos desde que estuvo en los Estados Unidos. “Lo mejor de los dos mundos ha sido un regalo; si después de viejo uno piensa que la vida no tiene oportunidades, nunca es tarde para que te lleguen todas las cosas que has soñado y de repente después de viejo me dan esa oportunidad de estar en televisión”, expresó.
“Tener la oportunidad de tener un programa en vivo por dos horas y media de lunes a viernes es un reto grandísimo, entonces ha sido un estímulo mental”, dijo Jairo efusivamente. Este programa cuenta con un completo equipo completo de trabajo en el que Jairo se siente a gusto y se desenvuelve de manera precisa y creativa. “Es sentirse rico uno de que te consientan, que te tengan tu ropa, tus cosas y que además sea aquí en Barranquilla, donde le hemos dado a Telecaribe y a Hoy es el Día un matiz muy internacional”, agregó.
Con base en que desde que era un niño siempre la televisión había llamado su atención, al igual que los medios y la actuación, el próximo mes (marzo) estará actuando en un programa regional por Telecaribe. “Estaré actuando en Los Yo Tuve, en un par de episodios cómicos y en la novela de Aníbal Velásquez también hago un papel pequeño de manager de Alfredo Gutiérrez”, comentó.
A su vez participó en una radionovela en la emisora Candela Stereo, participando en un guión de Yo me llamo, y también estuvo trabajando en una emisora en Miami llamada Romance en el que tenía un programa de 5pm a 6pm. Los fines de semana se dedicaba a presentar un programa de música colombiana de 3 a 6 de la tarde todos los domingos en Radio El Sol. “¡La radio es deliciosa!”, exclamó.
En estos momentos tiene más proyectos por delante, y aprovechará todas las oportunidades que le brinde la vida. “Siempre estoy pensando en nuevos proyectos, lógicamente ya yo tengo más pasado que futuro”, contestó riendo. Se encuentra asesorando a un grupo de artistas barranquilleras: Martini, y a un cantante cubano en Miami llamado Ray Chávez, quien también recibe de la ayuda de Jairo.
Jairo Martínez es un hombre querido y admirado por muchas personas. Su experiencia durante todos estos años lo ha ido llevando a triunfar sin nunca dejar de ser el mismo, manteniendo el carisma de un hombre que aprovecha las oportunidades de la vida sin esperarlas. “Yo le abro las puertas a las oportunidades sin meterme directamente sino decir ¡aquí estoy y para lo que necesiten utilícenme, dejo que la vida me sorprenda un poco, pero luchando y haciéndole ver a la gente que aquí estoy yo disponible para lo que me necesiten”, afirmó con una sonrisa en su rostro.
A su vez los componentes emocionales de su forma de ser han sido la clave para seguir adelante en su carrera y en sus proyectos. “Pienso que el día que uno sepa lo que el carisma es, yo creo que eso es algo que está en ti, que tú lo guardas. Mi temperamento ha sido el gran fuerte de mi vida, uno de los secretos de mi vida”, finalizó.
