Por: Marlon Barros | Fotos: Ignacio Acuña
Marjorie Eljach, profesional en Estudios Literarios y presidenta de la Asociación Cultural Besarilia de Madrid, y María Alejandra Arias, docente del Departamento de Español la Universidad del Norte, fueron las encargadas de revivir los cuentos de los Hermanos Grimm, y su oscura realidad, en el marco del cuarto día de Cátedra Europa.
El primer tema de conversación dentro del panel fue el papel complicado que los progenitores de los personajes cumplían dentro de las historias de los Grimm. “Este es un tema muy complicado”, afirmó Eljach. “En las historias reales las malas no son las madrastras, sino las madres”. Mencionó como ejemplo a Hansel y Gretel, al igual que a Blancanieves, afirmando que “quien decide dejar en el bosque abandonados a los niños es la madre, no la madrastra”, afirmó.
Cuando Arias tomó la palabra, indicó que el papel de los padres era ser cómplices en las fechorías de estas mujeres. “¿Y qué me dices de los padres de la bella durmiente?”, comentaba, “cuando tenía quince años, que es cuando está la maldición encima, ellos se van del castillo”. Rapunzel, Cenicienta y Caperucita Roja fueron otros ejemplos mencionados por las académicas.
En un repaso histórico, las investigadoras resaltaron que Jacob y Wilhelm Grimm eran eruditos lexicólogos y que, a diferencia de los distintos juglares, no iban de puerta en puerta repartiendo sus cuentos, sino que originalmente recopilaron historias que iban dirigidas a las élites académicas de la época. Sin embargo, al darse cuenta de que las familias y los niños también leían sus relatos, decidieron ajustarlos y suavizarlos un poco, además de ilustrar y crear, por primera vez, la idea de que la literatura se puede acompañar con imágenes.
Por otro lado, Eljach y Arias nombraron una lista de “elementos macabros” dentro de los cuentos de hadas de los Grimm: “Pedofilia, necrofilia, crueldad, envidia, canibalismo, culpa, venganza, crimen, abandono, mutilación; están en la mayoría de los cuentos”, aseveraron. El Enebro, para Arias, es la historia más tenebrosa, mientras que para Eljach, este título le pertenece a Blancanieves.
Seguido a esto, el profesor Pedro Waitman, moderador del Talk Show, lanzó una pregunta “sencilla, pero de respuesta compleja”: ¿qué sería de un mundo sin cuentos de hadas? Arias fue la encargada de responder, afirmando que los cuentos de hadas eran “eso que a nosotros, como seres humanos, nos ayuda a crear ese pensamiento mágico que necesitamos creer”. Eljach no se quedó atrás, y, siguiendo con esa misma idea, dijo que “a la larga, un mundo sin cuentos de hadas sería un mundo sin memoria”.
Las académicas, además, dieron a conocer su opinión frente al personaje de la Blancanieves. Mientras que Marjorie Seljach la calificó de tonta, Arias salió parcialmente en la defensa del personaje, señalando que, en vez de tonta, era inocente. La docente de Uninorte indicó que, si bien era un personaje fácil de persuadir y manipular, se trata una niña con ideas infantiles. “Lo que pasa es que nosotros lo vemos a la luz de Disney, que nos muestra niñas altas y esbeltas. No se niega que sea inocente, pero también hay que ver que ella es muy joven”, sentenció.
El personaje de La Bella Durmiente también fue blanco de críticas por parte de la pareja. “Me parece un personaje muy soso”, mencionó Seljach. Asimismo, declaró que la historia original no es sobre la princesa, sino sobre la maldición que cayó sobre el reino.
Asimismo, cuando el tema de conversación era el de relaciones de parejas dentro del universo de los Grimm, el ejemplo más predominante fue el del Príncipe Rana. En él, las expertas resaltan que el sapo no se convirtió en príncipe luego de ser besado, sino luego de que la princesa lo aventara contra la pared. Además, aclararon que el personaje de la princesa debía tener, en promedio, unos doce años.
En medio del panel, las conferencistas se tomaron un tiempo para aclarar que la intención de ellas al revelar distintos secretos al público no era la de acabar con los cuentos de hadas, sino “decir la cara oculta y mostrar la otra cara”. Para ellas, Disney ha “edulcorado mucho los cuentos de hadas”, y, aun así, Elijah sostuvo que los relatos “siguen siendo absolutamente patriarcales y machistas”.
Seguidamente, la personificación, animación y humanización de los animales dentro de la fantasía de los Grimm fue el centro de la conversación. Luego, las panelistas destacaron que, a pesar de que las narraciones de Jacob y Wilhelm son recopiladas y acogidas como cuentos, no poseen una estructura clara, y en muchas ocasiones había alguna aparición del tipo “Deus Ex Machina”. “En los cuentos de hadas puede pasar cualquier cosa”, manifestaron.
Para cerrar el panel, se dio paso a una ronda de pregunta con la audiencia, en la que las académicas solucionaron dudas del público. En ella aseguraron, por ejemplo, que, aunque hay muchos personajes similares dentro de los diferentes cuentos de Grimm, no existe relación alguna entre miembros de una historia con otra.
Como culminación de la jornada en el auditorio de la Universidad del Norte, Marjorie Eljach expuso la representación de los hermanos Grimm y sus cuentos dentro de diferentes escenarios en la televisión, analizando las series Once Upon a Time, Grimm y Tell Me a Story, y reconociendo cómo se valen los diferentes guionistas de la libertad de derechos del autor.