La diligencia fue fijada para llevarse a cabo el próximo 8 de octubre, por presunta manipulación de testigos. El exmandatario publicó en su cuenta de Twitter la citación del alto tribunal.
El día de julio de 2018, el alto tribunal convocó una investigación contra el expresidente por los crímenes de soborno y fraude procesal. Luego de 12 meses llenos de trámites y recursos, la Sala de Instrucción finalmente determinó la fecha para dicho proceso.
La Sala de Instrucción Penal de la Corte Suprema de Justicia estableció para el próximo 8 de octubre la solicitud para indagar al senador y expresidente de Colombia, Álvaro Uribe Vélez, por una supuesta manipulación de testigos.
Este llamado se da después de haber pasado un año en que empezó a investigación formal contra Uribe, y después de haberse presentado molestias y tropiezos en el mismo.
“De manera atenta, en cumplimiento a lo dispuesto por la Sala de Instrucción Penal con ponencia del H. Magistrado César Augusto Reyes Medina, en proveído del 14 de agosto del año en curso me permito informarle que dentro de la actuación adelantada en su contra se dispuso la práctica de pruebas y señaló el próximo 8 de octubre a partir de las 8 de la mañana para escucharlo en diligencia de indagatoria.
Este proceso se llevará a cabo en la calle 73 número 10-83 Torre D, piso 1 en Bogotá. Es de advertir que este proceso deberá usted venir acompañado de su defensor”, dice la cita para el llamado hacia el expresidente.
Álvaro Uribe Vélez se enfrentará con los magistrados que lo indagan en la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia. En este hecho, el senador deberá presentar su versión de los hechos acerca del marco de una investigación formal que gira entorno en su contra por los delitos de fraude procesal y soborno, los cuales se remontan en una presunta intención de querer controlar y manipular a los testigos que lo han juzgado de tener conexiones con paramilitares.
“He buscado, por dignidad y de acuerdo con la ley, desmontar atentados a mi reputación, desmontar testimonios manipulados y sobornados. Hace más de un año, en plena campaña, mi línea telefónica fue interceptada ilegalmente. Mientras transcurría la campaña, el magistrado dijo a varios periodistas que me iba a capturar. El magistrado que me investigaba, filtró a contradictores míos el expediente que armaba en mi contra, lo que aprovecharon para hacer publicaciones incompletas, editadas y difamantes de mi honra”, dijo el exmandatario en un comunicado de prensa.
“En otro proceso de falsos testigos, también manipulados, pedí infructuosamente ser escuchado en versión libre. Que la Corte permite la publicación de las 21 mil interceptaciones de mis llamadas y mensajes, filtradas a malquerientes, es de mínima justicia con la opinión pública. La ilegalidad de las interceptaciones es un tema muy importante, pero mucho más importante es que no hay una sola palabra mía que viole la ley. Y dos magistrados auxiliares, que han actuado en mi contra, con parcialidad, son hoy miembros de la JEP”, añadió también.
