Este ambicioso proyecto beneficiará a 150.000 habitantes en la zona de influencia de estos cuerpos de agua
El Distrito de Barranquilla busca saldar la deuda que tiene con los caños de la ciudad y, a través de un ambicioso proyecto que contempla inversiones de más de 200.000 millones de pesos, recuperará los cuerpos de agua, dignificará las condiciones de vida de quienes habitan las riberas y promoverá un proyecto turístico con navegabilidad, equipamiento urbano y un parque lineal.
“Ahí donde empezó la historia de la ciudad haremos un desarrollo que nos hará sentir orgullosos a todos los barranquilleros”, anunció el alcalde Jaime Pumarejo Heins .
La obra es descrita como histórica por su alcance e inversión, beneficiará a más de 150.000 habitantes de la ciudad que están bajo la influencia directa de esas aguas. Muchas familias de la zona le manifestaron al alcalde su anhelo de que acabe con las inundaciones que producen los caños cada aguacero en los barrios La Luz y La Chinita principalmente.
“A los habitantes de estos sectores quiero decirles que no solo canalizaremos y construiremos diques de contención; haremos una recuperación integral que nos permitirá preservar la historia y generar oportunidades a la gente con una plataforma de desarrollo urbano, impacto ambiental y atractivo turístico, que mejorará la calidad de vida de los residentes y comerciantes de todo este gran sector”, señaló.
En total son 6 caños, cuya extensión supera los 11 kilómetros. “Aquí nació Barranquilla. Aquí floreció la navegación que nos conectó con el país y el mundo. Aquí floreció el comercio al que tanto le debemos. Desde aquí fuimos, en un momento de nuestra historia, la ciudad más importante de Colombia”, indicó el alcalde en la presentación de proyecto.
Antecedentes
La navegación marítima y el transporte por carreteras fueron relegando a los caños, que poco a poco fueron convirtiéndose en basureros públicos y asentamientos de invasión. Este deterioro se da a pesar de que las haciendas entre Soledad y el puente Pumarejo hicieron parte de la antigua villa donde se originó Barranquilla.
Fueron largos años de estudios y trámites legales para tratar de buscarle solución al problema de los caños. Pero el problema se mantuvo, así que el documento Conpes 3351 de 2005, reveló:
“El deterioro de los caños de la cuenca oriental es resultado del proceso de urbanización de la zona y de su inadecuada planificación. Los caños la Ahuyama, del Mercado, de las Compañías, los Tramposos, Arriba y Agromar se han contaminado con aguas residuales, con los consecuentes problemas de salud ambiental de la población ubicada en la zona de influencia, que pertenece a estratos 1 y 2. El principal mercado público de Barranquilla también se ubica en cercanía a los caños lo cual genera un problema de salud pública debido a los vertimientos de residuos sobre estos”
Entre 2016 y 2019 se ejecutaron en la ciudad obras de infraestructura que, con dragado y canalización, conectaron los cuerpos de agua con el que el desarrollo que el Distrito desplegaba para devolver la mirada de Barranquilla al río.
Recuperación integral
Por otro lado, el alcalde explicó que, “Lo que buscamos ahora es restauración hidráulica, mejoramiento paisajístico y restauración ecológica, lo que garantiza una solución estable, permanente y para que sea una solución estable y de impacto urbano”.
El proyecto de Recuperación Integral del Sistema de Caños se propone habilitar el uso de los cuerpos de agua para actividades cotidianas de los habitantes, restaurar y proteger el ambiente natural de los cuerpos de agua, mejorar la navegabilidad y fortalecer la gestión para garantizar el mantenimiento de los canales.
La idea de este proyecto es garantizar que se mantengan a los caños como vasos comunicantes del río Magdalena, lo cual los articula con los proyectos de la Avenida del Río y el Gran Malecón y, con la intervención de mercados y recuperación del Centro Histórico que adelanta la administración.
Los trabajos comprenden la recuperación, primero del caño de la Ahuyama, cuya intervención está tasada en 82.000 millones de pesos, continuando luego con los caños de las Compañías, Los Tramposos, del Mercado, Caño Arriba y La Tablaza.
La sección del canal Ahuyama se ampliará con una forma trapezoidal, lo cual generará un volumen de dragado de aproximadamente 179.000 metros cúbicos, en tanto se construye un dique al costado occidental, todo lo cual contendrá las inundaciones.
Los puentes de la carrera 30 y 38 ampliarán su luz para poder hacerlo, entre otras cosas, navegable.
“Soñamos con nuevos caños, queremos que esto se convierta en espacios de vida agradable y simbolice la recuperación de un emblemático, pero olvidado lugar”, puntualizó Pumarejo Heins.