Por
“Telenovela de Canal 4 contiene violación y golpizas a niña obligada a casarse”, así tituló el portal de noticias Sudestada un artículo periodístico en contra de la emisión de Esposa Joven, una reconocida serie turca que se encontraba próxima a emitirse en Uruguay.
De acuerdo con la investigación del medio, dicho producto televisivo “justifica la violencia contra la mujer” y “violenta los derechos de niños, niñas y adolescentes”. Ante semejantes declaraciones, más de veinte asociaciones feministas exigieron que la serie fuese cancelada, llegando incluso a recoger firmas a través de la plataforma de peticiones AVAAZ.Org.
Si bien toda esta polémica ocurrió en 2016, mi objetivo reavivándola consiste en defender la trama de esta producción turca, al igual que resaltar la importancia de su visibilización tanto en Uruguay como en otros países de América Latina.
Para empezar, es preciso aclarar que la trama de Esposa Joven gira alrededor de Zehra, una niña de 13 años que es obligada a casarse con un adinerado joven para saldar una deuda familiar. A raíz de dicho matrimonio, la joven atraviesa situaciones que abarcan maltrato físico y psicológico, esclavitud, maternidad temprana e incluso abuso sexual, condiciones que la impulsan a intentar escapar constantemente.
Según la petición de censura radicada por los colectivos feministas, “la naturalización de situaciones como las que se recrean en esta ficción reproducen y sostienen los parámetros culturales que legitiman la violencia de género”. Sin embargo, dicha afirmación no provino de su experiencia propia con la serie., sino que surgió únicamente con base en lo expuesto por Sudestada.
En contraste, como espectadora de la serie, me siento en la potestad de decir que, al contrario de naturalizar las vejaciones anteriormente mencionadas, considero que la producción busca promover espacios de discusión sobre las mismas. Como prueba de ello, cuenta con la presencia de personajes protagónicos como la maestra o el cuñado de Zehra, quienes a lo largo de toda la historia se revelan ante la violencia machista de la cual es víctima, e intentan ayudarla a escapar y recuperar el control de su vida. Asimismo, el final de la serie también denota un enfoque social, ya que concluye con la protagonista publicando un libro con su historia para generar consciencia acerca del matrimonio infantil en Turquía.
Otro elemento que también desató el descontento de las asociaciones feministas fue la publicidad de la serie, muy criticada en su momento por tener (desde su óptica) “una canción original de supuesto tono romántico (elemento central de marketing) que promueve la sumisión de la niña (mujer) al antojo del hombre golpeador y violador”. Según varios portales web, la traducción oficial de dicho tema es “Ey, amor. Vine por ti como mi madre me lo enseñó. Arrúllame con cuentos para dormir sobre tus rodillas. Ay, amor ¿Me vas a golpear? ¿Cómo el fuego, lo debo soportar? Si sabes que todavía soy pequeña ¿Me lastimarás? ¿Vas a escucharme?”.
Si bien el término “amor” es polémico, no considero que desvirtúe el que (para mí) es el propósito central de la melodía: dar voz a la “esposa” joven. De hecho, viéndolo desde otro ángulo, resalta aún más el papel forzado de amante que se le quiere dar a las niñas, a las cuales la canción también presenta como víctimas de una tradición milenaria que intenta hacerlas madurar con violencia y acallar su necesidad de amor y comprensión. Por ello, más que un tema que apoya la sumisión, considero que “Ey amor, vine por ti” es un himno en contra del matrimonio infantil que debe ser promovido junto con la serie.
Finalmente, abordando la problemática del matrimonio infantil más allá de la ficción, cabe mencionar que, de acuerdo con el informe de 2019 “Perfil del matrimonio infantil y las uniones tempranas” de UNICEF, una de cada cuatro mujeres se casó antes de los 18 años en América Latina y el Caribe. De seguir aumentando, dicha estadística puede generar que América Latina tenga uno de los índices más elevados de matrimonio infantil para 2030. Por tal motivo, reuniendo todo lo dicho previamente, reafirmo la necesidad de ver a productos como Esposa Joven más como elementos de sensibilización que como amenazas susceptibles de censura.
……..
Este contenido fue supervisado por el periodista y docente Jorge Sarmiento Figueroa, y la editora de sección de Género, Estefanía Gualtero, como parte de la estrategia pedagógica del curso de Argumentación Periodística