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Por: Elizabeth Zelner Pérez | Foto: Karolina Grabowska, vía Pexels

A partir de todos los mitos que existen alrededor del uso de los productos menstruales, específicamente de las copas, BLOOM Colombia busca desmentir el uso de las mismas en mamás y recalcar sus beneficios.  

Según el DANE la mayoría de mujeres que acuden a otras alternativas diferentes a las toallas higiénicas o tampones durante su ciclo menstrual es menor de 28 años. 

En la amplia variedad de ofertas de productos menstruales se encuentran las copas, las pantys absorbentes, las compresas de tela, entre otras. Según la Academia de BLOOM, dedicada a la investigación menstrual, 96% de las usuarias quedan satisfechas y continúan usando la copa menstrual. Sin embargo, debido a la cantidad de tabúes y estigmas sobre la menstruación y el funcionamiento de estos productos innovadores, mujeres mayores de 30 años, muchas de ellas mamás, se abstienen de hacer el cambio y probarlos.  

“El uso de la copa menstrual no solo es una elección saludable y ecológica, sino también un gesto de amor y empoderamiento hacia las madres”

Laura restrepo, CEO de BLOOM

El Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) identificó que desde 2018 hasta 2022 el porcentaje de personas que usaron copa menstrual es mayor entre las edades de 18 a 28 años, traduciéndose en un porcentaje de 4,4%. Sin embargo, entre las mujeres de 46 años o más, la cifra apenas se acercaba al 0,9%. 

Por tal motivo, BLOOM, una marca de productos para la salud menstrual femenina, busca promover información que acabe con estos tabúes e inviten a las mamás a darle la oportunidad a las copas menstruales o a los calzones absorbentes, pensando en brindar soluciones a las infecciones, contaminación y sobrecostos que generan los productos desechables de salud menstrual.  

“En BLOOM celebramos juntas una opción que puede cambiar la vida de muchas mamás, y que las ayudará a sentirse más cómodas, seguras y libres durante su periodo menstrual, además de ahorrar dinero”, afirma Laura Restrepo, CEO y fundadora de Bloom.

El principal mito sobre el uso de copas menstruales en mamás 

La falta de información dirigida a todo aquello relacionado con la menstruación ha llevado a la conformación de mitos sobre el tema. Uno de ellos, frente al uso de copas menstruales. Se cree que las mujeres que han tenido partos o son mayores de 30 años necesitan una talla de copa más grande, lo cual resulta en estigmas falsos e inseguridades.  

De acuerdo con BLOOM Colombia, la definición por edad y partos hace creer a las personas que las mamás o las mujeres mayores de 30 años tienen un canal vaginal más ancho y un suelo pélvico menos fortalecido. Sin embargo, existen muchas variables más allá de ser mamá como lo son: la actividad física, la fortaleza del suelo pélvico previa al parto, las condiciones en las que se lleva a cabo el parto, el acompañamiento de profesionales después del parto en la recuperación de tejidos, entre otras.  

Laura Restrepo aseguró que: “desde la experiencia de más de 30,000 usuarias en BLOOM hemos comprobado que la edad y los partos no son factores relevantes para escoger la talla de la copa, lo que en realidad se debe tener en cuenta es la cantidad de flujo. Tenemos clientas que han tenido hasta 3 hijos por parto natural, mayores de 40 años y la talla pequeña de BLOOM les funciona perfecto. Así como hay mujeres de 25 años y sin hijos que necesitan la grande debido a su flujo abundante”. 

Laura Restrepo, CEO y fundadora de BLOOM

Se puede concluir que las mamás también pueden hacer uso de las copas menstruales, no solo por comodidad y ahorro, sino porque aporta beneficios para el cuerpo de quienes deciden usarlas, disminuye los dolores menstruales, es natural, no produce olores ni goteos y tiene una durabilidad de entre 8 a 10 horas.  

Marcas como Bloom se han dedicado a fabricar copas menstruales de silicona médica hipoalergénica, apta para ser usada por todas las niñas, adolescentes, mujeres y personas menstruantes en nuestros días del periodo menstrual. Además, es una herramienta de empoderamiento que ayuda a promover el autoconocimiento de la propia vulva y la sexualidad.