Por: Daniella Yepes
Colombia es un país que se ha caracterizado por su biodiversidad en flora y fauna. Un país que cuenta con la Amazonia, “El pulmón del mundo”. Un país que está lleno de selvas, que aún no han sido exploradas, sin embargo, en los últimos tiempos se ha venido presentando un fenómeno que está acabando con estas riquezas. Los grandes bosques con los que cuenta este país han ido desapareciendo poco a poco como consecuencia de una plaga, la plaga de la deforestación.
La deforestación es uno de los problemas ambientales más graves y más importantes en estos momentos. Esta arrasa los bosques y las selvas de forma masiva ejerciendo bastante influencia en el proceso del cambio climático, y perdida de suelo que tenemos en muchas partes del país, en especial, en los departamentos de Caquetá, Guaviare y Meta.
El informe publicado por El Tiempo del Instituto de Estudios Ambientales (Ideam) indica que el país está perdiendo la guerra contra la deforestación. Los mapas de 1990 a 2015 tienen un factor común, y es que la tala de selva tropical se concentra principalmente en los departamentos anteriormente mencionados.
Los motivos de la tala indiscriminada son muchos, sin embargo, la mayoría han sido relacionados con el dinero. Luz Marina Mantilla, directora del Instituto Amazónico de Investigaciones científicas (Sinchi), comenta que una de las causas a este fenómeno lo genera la ganadería extensiva desarrollada en esos tres departamentos, los cuales reúnen la mitad de las amenazas de deforestación a nivel nacional, según el Ideam.
La deforestación tiene muchas consecuencias y una de estas es el daño que le genera al ciclo hidrológico. El ingeniero ambiental Juan Camilo Restrepo, quien tiene un PhD en Oceanografía, nos explicó como la deforestación está afectando uno de los componentes fundamentales del ciclo hidrológico, ya que desequilibra los procesos de infiltración, intersección y escorrentía. Esto quiere decir que cuando no tenemos cobertura vegetal, por causa de la deforestación, el agua corre más rápido dentro del ciclo hidrológico.
“Por eso estamos experimentando lo que estamos experimentando ahora, que cuando deja de llover hay sequias muy fuertes e inmediatamente después, comienzan las lluvias y tenemos inundaciones y eso antes no pasaba, y es porque se está perdiendo esa capacidad de ese componente del ciclo hidrológico que te mencionaba. Eso nos hace cada vez más susceptibles y vulnerables a las sequias y a las inundaciones y es por eso que la gente piensa que pierden el caudal, pero en realidad es porque cuando no llueve, como no hay reservas en el suelo, porque lo que hacen los árboles es que el suelo pueda absorber, entonces cuando absuelve en ese excedente, en la época de sequía libera ese excedente y los ríos se alimentan. Eso pasa a través de los acuíferos subterráneos, a través de agua que esta almacenada en el suelo etc., pero eso se está perdiendo” dijo el ingeniero Juan Camilo.
Si bien este no es el único fenómeno generado, la capa de ozono también ha salido afectada, y para esto el ingeniero Jaime Escobar Jaramillo, con PhD en Cambio Climático se hizo presente, ya que nos habló del papel fundamental que tienen los árboles debido a que esto son los responsables de la absorción de gases de efecto invernadero, responsables del calentamiento global. “Tener menos bosques significa emitir más cantidad de gases de efecto invernadero a la atmósfera y una mayor velocidad y gravedad del cambio climático.”
El ingeniero Escobar habló acerca de las medidas que se deben tomar para frenar esto: “Medidas pueden haber muchas, pero volvemos a lo básico, lo básico es que Colombia no debería experimentar las tazas de deforestación que está experimentando en este momento por el tema del cambio global, mi propuesta es que deben haber incentivos, herramientas políticas, para que las tazas de deforestación no sean tan altas, que de hecho son las más altas a nivel global”.