Por: Paul Padilla. Twitter: @paulpadillav
Foto tomada de: Pixabay.com
La modalidad de la alternancia en los colegios para permitir el regreso de las clases presenciales ha generado opiniones dividas en el sector educativo, algunos docentes, directos y padre de familia respaldan la modalidad mientras que otros no la ven viable aún.
En Barranquilla, los colegios empezarían a implementar el modelo de alternancia en febrero de 2021, así como otras ciudades del país como Bogotá, donde la alcaldesa Claudia López ya confirmó el regreso de las clases presenciales en las instituciones educativas.
El presidente d la Asociación de Educadores del Atlántico (Adeba), José Ignacio Jiménez afirmó que apoyan el regreso de las clases presenciales, sin embargo, también dijo que existen muchas incertidumbres con respecto al proceso y a las medidas que se van a tomar.
“Estamos convencidos y seguros que los maestros no podemos ser remplazados por un computador o un celular, nuestra función es educar y la mejor forma es interactuando con nuestros niños y jóvenes. Exigimos las garantías reales para que puedan estar seguros en las aulas de clases”, dijo José Jiménez.
Por su parte la secretaria de Educación de Barranquilla, Bibiana Rincón habló de cinco grandes desafíos en este retorno a las aulas: recuperar la confianza en las escuelas como sitios seguros, preparar a la comunidad para el regreso, reelaborar las emociones que produce el regreso, resignificar los aprendizajes para el regreso a la presencialidad y fortalecer las emociones que produce el regreso.
“Esta enfermedad es endémica y se puede pegar en cualquier lado, nosotros lo que vamos a hacer es minimizar los riesgos, convencer al otro de que le vamos a poner las condiciones para que tenga el mínimo riesgo. Hicimos el plan en 5 desafíos, porque para volver hay que pensar en este plan que es el antes o durante el regreso y el seguimiento”, explicó la secretaria.
“Debemos tener listo el plan de alternancia de cada colegio en enero; a finales de diciembre debemos saber con qué contamos, ya se les dio un plan general y ahora el rector o rectora debe pensar las acciones desde su contexto especifico y entregarnos un plan para el debido proceso”, concluyó Rincón.