Por: Andres F. Angulo V.
En un sorpresivo giro, la Organización Deportiva Panamericana (Panam Sports) anunció el retiro de Barranquilla como sede de los Juegos Panamericanos de 2027 debido al incumplimiento del pago de ocho millones de dólares contemplados en el contrato. La decisión fue tomada después de que el Gobierno Nacional no realizara dos transferencias programadas, cuatro millones en diciembre y otros cuatro en enero.
La ciudad colombiana había sido seleccionada en 2021 para albergar la vigésima edición de los juegos regionales, y a pesar de algunas dudas surgidas en 2022 sobre el cumplimiento de requisitos, fue ratificada. No obstante, el 30 de diciembre pasado marcó el vencimiento de uno de los plazos otorgados por Panam Sports para cumplir con el contrato, sin que se recibiera una respuesta satisfactoria por parte de las autoridades de Barranquilla.
En un comunicado emitido el 3 de enero, Panam Sports explicó que Barranquilla había solicitado una prórroga en los plazos, la cual fue aceptada, fijando nuevas fechas límite para el 30 de diciembre de 2023 y el 30 de enero de 2024. Sin embargo, la ciudad no respondió dentro del nuevo plazo, llevando a la “decisión indeclinable” de retirar la sede.
Las obligaciones financieras consistían en dos pagos de cuatro millones de dólares cada uno, a ser girados en diciembre y enero respectivamente. El Gobierno Nacional, representado por el Ministerio del Deporte, debía realizar estas transferencias. Ante la noticia, el alcalde recién posesionado, Alejandro Char, argumentó que un problema en Hacienda Pública impidió el pago a tiempo, pero aseguró que el dinero está completo y que hay una orden presidencial para efectuar la transferencia.
En medio de la crisis, el presidente Gustavo Petro intervino para resolver la situación, según afirmó el alcalde Char: “He recibido un mensaje directo del presidente Gustavo Petro, que se está comunicando directamente con el presidente de Chile (Gabriel Boric) para que interceda y poder solventar esto”. Aunque el alcalde expresó optimismo, la revocatoria de la sede generó tensiones políticas. Representantes de diferentes partidos anunciaron acciones para esclarecer la situación. Andrés Forero, del Centro Democrático, presentará una proposición de control político para que la ministra del Deporte, Astrid Rodríguez, explique la pérdida de la sede.
En un tono más acusatorio, la representante oficialista María Fernanda Carrascal responsabilizó al exalcalde Jaime Pumarejo, aliado de Char, por dejar que la sede fuera revocada. Desde los partidarios del Gobierno, como el representante Agmeth Escaf, se escucharon críticas contundentes calificando el hecho como “inconcebible, injustificable e imperdonable”. Hasta el momento, ni el presidente Petro ni el Ministerio del Deporte han emitido declaraciones públicas sobre la decisión de Panam Sports.
