Últimamente los planes de la NASA están indecisivos luego del accidente del cohete Soyuz-FG en medio de una misión al mando de la Estación Espacial Internacional (ISS) el pasado jueves.
Frente a esto, la comisión estatal que se ocupa de la investigación del cohete había presentado la decisión de entablar una subcomisión que estudiará una posible clausura.
La comisión agregó que el trabajo transcurre en estrecha colaboración con socios extranjeros que, por medio de un comunicado, trata tanto de un escenario negativo en el que la estación se clausura, como de la elaboración de un nuevo horario de vuelos.
La nave espacial Soyus MS-10 con el ruso Alexéi Ovchinin y el estadounidense Nick Haghe a bordo, emprendió su viaje el pasado jueves de la base de Baikonur, Kazajistán rumbo a la ISS.
Dos minutos tras el despegue, ocurrió un fallo en el cohete durante la separación de la primera etapa con una subsiguiente eyección de la cápsula recuperable que al final descendió en modo balístico y aterrizó cerca de la ciudad de Kazaja de Zhezkazgán.
Ambos tripulantes terminaron por evacuar la cápsula en buenas condiciones. Hasta el momento las causas del fallo son investigadas por una comisión de Roskosmos que ha suspendido el envío de las naves tripuladas.
A pesar de los inconvenientes, el director de Roskosmos, Dmitri Rogozin, anunció que los astronautas regresarán en la primavera de 2019. También existe la fuente que en diciembre del presente año, según el administrador de la NASA, Jim Bridenstine, se podrá llevar a cabo la misión mientras se defina el asunto del equipo que comandará el proyecto.
El sistema de lanzamiento del Soyuz es el único disponible para que los humanos puedan ir al espacio. Si de ahí viene al caso de fallas serias, esencialmente finalizaría por aislar en la Tierra hasta encontrar una solución pertinente.
Foto: @ISS_Research