La crisis que atraviesa el vecino país está afectando la economía de un gran porcentaje de colombianos. Un claro ejemplo es lo que se vive en Maicao, municipio ubicado en el norte de la Guajira.
El sobrenombre de Maicao no es en vano: “la vitrina comercial de Colombia”, pues en este municipio de La Guajira, el comercio es uno de los protagonistas. Muchos colombianos prefieren viajar para comprar ropa de marcas exclusivas y electrodomésticos al por mayor y al detal, ya que son más baratos por estar ubicados en una zona fronteriza.
El centro de Maicao es un lugar lleno de almacenes de todo tipo y está ubicado al lado del Mercado Público. En éste, se encuentran los “depósitos”, es decir, tiendas que venden víveres y licores. También hay tiendas de utensilios para el hogar, cocina y aseo, fruteras, carnicerías y demás.
Anteriormente se podía caminar y observar los diferentes almacenes, tiendas y depósitos e, incluso, se podía andar en carro sin trancones o ventas ambulantes que obstruyeran la movilidad.
Hoy en día es casi imposible andar en carro por las ventas de gasolina en la calle y tampoco es más fácil caminar por los andenes, ya que gracias a la crisis del vecino país, los venezolanos se han apropiado de las calles del mercado local. Su lugar de venta son los andenes que les sirven como mostradores de mercancía, y venden desde implementos de aseo para el uso personal, hasta maquillajes, medicamentos, leche en polvo, víveres, frutas, carnes por libras, ropa, gasolina, entre otros.
Esto ha hecho que la economía del comercio del municipio disminuya notablemente. Los precios que manejan los venezolanos son muy bajos y por eso la mayoría de los habitantes y personas de escasos recursos los prefieren.
Los depósitos que antes vendían de cuatro a siete millones de pesos por jornada apenas alcanzan el millón diario, y también han perdido clientes que venían de otros municipios de La Guajira a comprar al por mayor, dice el comerciante Geovannys Alcalá.
La crisis del comercio afecta directamente a la alcaldía, ya que si los comerciantes no pagan el Impuesto de Industria y Comercio deja de recaudar cerca de $150 millones mensuales, y el municipio no tiene una fuente alterna para mantener las instituciones que le pertenecen, ya que no recibe mucho dinero de regalías por parte del gobierno nacional.
Como se puede apreciar, tal problemática afecta toda la economía de este municipio, ya que sus mayores ingresos vienen del comercio.