Por: Esteban Ortiz / Fotos: @damialoficial / @Esteban60339299
A propósito de su último lanzamiento, “Pensando en ti”, Damian se deja conocer un poco más y accede a contarnos algunos datos importantes de su vida artística y personal.
Creo que muchas veces pensamos que lo que lleva al estrellato a un artista en la industria musical es su capacidad de interpretación. Esta es solo una parte de lo que debe tener un gran artista. Algunos cantantes son reconocidos por ser personas diferentes en los escenarios y en la vida cotidiana, pero este no es su caso. Gracias a su actitud como persona, su humildad al expresarse, su alegría costeña que siempre está y la buena vibra que lleva por dentro, Damian, un cantante y compositor barranquillero, logra romper fronteras en el escenario musical y consolida sus canciones en los listados de la música latina.
Con los rulos en su cabello que lo caracterizan y lo hacen inconfundible entre la gente, y con esa sonrisa de siempre, llega hasta el lugar citado. Con ánimo por empezar, Damian nos cuenta detalles de su vida que nos ayudan a entender que hay detrás de esa alegría y esa buena vibra que siempre se le nota en su rostro y sin pensarlo, también la trasmite.
Tenía que conocer de donde provenía esa alegría que irradiaba y contagiaba a todo el mundo.
– Eres una persona muy alegre, no solo se te nota en los escenarios, sino también en la vida, en todos lados a dónde vas. ¿Desde pequeño siempre has sido así?
-Sí, yo siento que soy un bendecido, un privilegiado por haber nacido en la familia en la que nací. Tuve una niñez muy bonita junto a mi papá, mamá y mis hermanos. Yo crecí en el barrio Hipódromo en Soledad y allá estuve rodeado de amigos, de música, también desde muy niño. Entonces siento que pude crecer en un ambiente muy bonito y eso me ha permitido ser una persona con una buena actitud y alegre, siempre. Sí claro, todo viene de la niñez para mí.
Mientras se reía un poco, al mismo tiempo se delataba y contaba lo divertida que fue su niñez en su paso por la escuela, cuando tan solo tenía siete años y lo más importante era la música, con la que hoy en día está muy bien atado y que nunca espera separarse.
– En el colegio, por ejemplo, ¿cómo te comportabas?
– Bueno, ja, ja, ja, muy extrovertido y participativo. También conté con el privilegio de que desde niño tuve el apoyo de mis papas, en la música. Entonces, desde primaria, recuerdo yo, pertenecía a la Banda de paz del colegio. Luego en sexto de bachillerato, presenté mi primera audición, entonces ahí hice parte del grupo musical del colegio, y de ahí todo el bachillerato en el grupo musical. Después me mandaban a concursos en todos lados, entonces todo fue como conectándose, una cosa con otra. Y en el colegio, bueno, siempre hacia parte de los actos cívicos, de las actividades, de la emisora del colegio. Siempre, siempre, estaba en todo esto del arte, del entretenimiento y de la música. Según lo que puedo recordar y los registros fotográficos que hay por ahí, cantaba en los actos cívicos. Recuerdo que, desde chiquito imitaba, en su momento, la música de Diomedes Díaz y también canciones infantiles. Pero sí, yo creo que desde los siete años conscientemente pude iniciar el camino de la música.
Al parecer nada lo hacía cambiar de opinión, estaba claramente dicho que Damian no quería otro camino diferente a la música. Lo demás solo lo veía como diversión
– ¿Siempre fue la música o hubo algo más aparte de esta?
– ¡No!, que yo recuerde siempre fue la música. Fue por lo que yo me sentí más atraído desde muy niño. Hubo un tiempo en el que me gustó como el Basketball, pero no, siempre tuve claro que lo que me movía el alma por encima de cualquier hobby, era la música.
Con tan solo catorce años, Damian ya estaba incrustado en el mundo musical. Cantar no solo era su pasión, también le gustaba escribir mucho, por ejemplo, las cosas que le inspiraban y sus sentimientos los plasmaba en hojas de papel. En una de esas hojas escribió su primera canción, la cual también grabó. Esa fue la canción que le abrió las puestas en la música y lo incitó a seguir en este arte.
– Tengo entendido que la primera canción que compusiste fue “More”. (Interrumpe afirmando que estoy en lo correcto y ríe) ¿Para quién o qué persona en especial fue esta composición?
– Bueno, fue para una noviecita de esa época, morena, pelinegra. Sí, realmente fue la primera canción que grabé y que fue pública, por decirlo así, porque yo había empezado a componer desde antes.
– Y más o menos ¿a qué edad?
– Yo estaba profesionalmente trabajando en la música. Pude haber tenido 20 años o 19, tal vez. No mentira, 19 o 18 cuando lancé “More”. Pero yo profesionalmente empecé a los 14, y ya desde esa edad había empezado a componer. Sí, “More” fue la primera que grabé y que se le grabó vídeo y todo. Oficialmente fue “More” la que inicié como compositor.
– ¿Qué tanto éxito tuvo la canción?
– Aquí en Barranquilla sonó mucho. Sobre todo, porque, como te digo, cuando empezamos a los 14 años fue un camino bonito, se me abrieron muchas puertas. Era un adolescente haciendo música y como fue mi primera grabación, pues recibí el apoyo y aquí sonó mucho. Después de esa como a los seis meses grabamos otra. Y de ahí me he acostumbrado a que cada seis meses puedo estar lanzando algo nuevo. Fue muy bonita esa experiencia.
Lamentablemente no todo fue alegría para Damian. A pesar de esa sonrisa que siempre lo caracterizaba desde pequeño, hubo un tiempo donde ésta no estaba y, lastimosamente, dominaba la tristeza y el desánimo. Fueron momentos duros para el artista los cuales no fueron fáciles de recuperar. Un año completo que Damian desea dejar en el pasado y tomar esas experiencias más bien, como impulso para seguir adelante a pesar de las caídas que nos da la vida. Esa sonrisa con que llegó se apocó cuando empezamos a hablar de sus malos recuerdos.
– Tuviste momentos duros en tu vida, por ejemplo, cuando sufriste de cáncer en 2003. ¿Cómo fue ese momento duro de tu vida?
– Claro, durísimo, porque en febrero del 2013 fallece mi mamá, que era uno de mis pilares. Creo que el pilar fundamental parar empezar fue mamá y papá. Ella fallece lastimosamente de cáncer de mama en febrero, y en marzo entro a sentirme muy mal y es cuando me diagnostican de cáncer que, si lo atamos a tiempo, puede quitarme la vida. Entonces, el 2003 en especial fue un año muy duro a nivel personal, porque aparte de la muerte de mi mamá me tuve que concentrar en atacar el cáncer, combatirlo y recuperarme. Afortunadamente aquí estoy echando la historia. Gloria a Dios, pero fue difícil emocionalmente, sobre todo porque venía de la muerte de un ser querido tan vital como lo es mi mamá.
– ¿Cuánto tiempo te tomó recuperarte o aliviarte un poco?
– Es que, para mí, puedo considerar que fue un doble luto, un doble dolor, por decirlo así. Fallece mi mamá en febrero y yo me enfermo en marzo y entonces como que no hubo mucho tiempo de hacerle luto a mi mamá, a la muerte de mi mami, sino recuperarme y de operarme rápido para poder combatir el cáncer que me estaba afectando. De ahí el resto del año, unos seis o siete meses estuve en recuperación total, donde estuve en una cama gran parte del tiempo. No podía estar ni boca arriba, ni boca abajo, sino a medio lado porque la operación fue en el coxis. Si no estoy mal se llama Osteosarcoma, que es un cáncer que sale de los huesos, en este caso fue del último hueso de la columna entonces me afectó toda la parte lumbar, no podía caminar, era todo un problema de la cintura para abajo, era un problema terrible. Entonces quedé en cama muchos meses. Creo que ese año en especial fue durísimo. En 2004 ya empieza uno como a recuperarse diferente. Bueno, y la muerte de mi mami, se logra como sanar un poco herida pero ahí queda el vacío, por decirlo así, de una persona que te apoyó siempre. Bueno, ahí vamos. En memoria de ella también se hacen muchas cosas como para honrar su recuerdo.
Como dice el dicho, la vida da muchas vueltas y al parecer, a este artista le dieron muchas. A pesar de tener la música como un pilar fundamental en su vida, Damian entra a estudiar Comunicación Social y Periodismo en la Universidad Autónoma del Caribe. Suena un poco disonante, pero al final la vida le dio otra vuelta y la comunicación social le terminó sirviendo para su carrera artística como músico.
– Hace poco me estabas contando que siempre fue la música, desde pequeño es lo que más amas, pero no logro entender ¿Cómo fue que terminaste estudiando Comunicación Social y no Música?
– Ja, ja, ja, ja, lo que pasa es que mi primera intención era estudiar Música y cuando hago todo el trámite para estudiar aquí en Bellas Artes no se pudo. Los cupos ya estaban listos, no pude hacerlo a tiempo. Entonces después entré a estudiar en la EDA, pero solo fueron unos tres meses porque el trabajo, yo en ese momento estaba trabajando, no me dejaba. Gracias a Dios tenía mucho trabajo, entonces no podía concentrarme 100% en el estudio. Después de seis meses de no estar estudiando oficialmente nada, yo pensaba y pensaba, y un amigo, en ese momento era quien estaba liderando ahí una de las partes artísticas en la Autónoma, me dijo: “oye, si quieres estudia aquí comunicación y después ves si te gusta, y después puedes terminarla y si no te gusta, entras a estudiar Música el próximo semestre”, y yo dije: “bueno de una”. Con el tiempo me empezó a gustar. O sea, entré por casualidad entre comillas, pero me terminó gustando, además me terminó sirviendo para mi carrera como músico, mi carrera como escritor, como compositor de canciones, para la redacción. Me gusta mucho la ortografía. Entonces, al final nada es casualidad y me terminó sirviendo para mi carrera musical.
– Pero después ¿Lograste estudiar Música?
– No, no. Después de eso ya no estudié música y todo lo hice empíricamente y bueno, hasta donde me ha traído la música ha sido empírico. Gracias a las experiencias, a las oportunidades que se me abrieron. Yo me gradúo de Comunicación Social en el año 2007, y tengo la gran fortuna de que a partir del segundo semestre estuve becado toda la carrera cantando en las orquestas y grupos musicales de la universidad. Entonces conté con ese privilegio que al final es una inmensa ayuda y ponía a practicar mi talento allí, haciendo lo que me gustaba.
Como género y ritmos, Damian nació escuchando reggae de artistas y bandas importantes como “Bob Marley“ y “UB40“. Siempre ha disfrutado componer música de este estilo, por ejemplo, su ultimo sencillo “Pensando en ti”, que está compuesto cien por ciento de reggae. También le gusta mucho la música del caribe, su sabor caribeño lo inclina por los ritmos tropicales y con la evolución de su carrera, esos ritmos los ha venido fusionando con los géneros urbanos.
– Pienso yo que hay algo que te hace único como artista y es esa capacidad artística que tienes de introducir diferentes géneros y ritmos en tus canciones. ¿Estás de acuerdo con lo que digo o piensas tú que hay algo más que te diferencia?, claro, aparte de tu buena vibra.
– Sí, yo siento que con cada cosa que hago, trato de funcionar varias de las cosas que me gustan. En mis canciones es muy raro, muy difícil, yo creo que no lo he hecho, que tu escuches una canción pura, pura de un género. Pura, pura es muy raro. Creo que en toda mi carrera la única que he subido pura, pura de reggae, de principio a fin es la más reciente, la que acabo de lanzar. Pero esto, siempre funcionó, le meto reggae con cumbia, le meto electrónica con algo de folclor, el merengue no lo hago merengue normal, sino que le meto merengue urbano y así. Sí, el sello puede ser ese, que hago fusión de mi música y que, bueno, aparte mi color de voz que es distinto a cualquier otro color de voz, puede ser lo que me diferencia y que desde ahí ponemos nuestro granito de arena a la música.
En este punto conocemos realmente que es lo que desea Damian con su típica frase “la buen vibra”.
– El nombre de tu orquesta es la “La buena vibra”. También he visto que utilizas esta frase en muchos lados. ¿Por qué tu orquesta se llama “La buena vibra” y por qué utilizas tanto esta frase?
– Bueno, precisamente es por eso mismo. Yo siempre quiero estar rodeado de buena vibra. Aquellas personas que vengan con negativismo, con quejas, con críticas negativas, con cosas feas, no las quiero cerca de mí. Yo siempre quiero estar rodeado de buena vibra, es decir, mi banda, mi equipo de trabajo, las personas que están conmigo sacando adelante este proyecto. Todo el que esté conmigo en el proyecto, tiene que tener buena vibra, esa es el primer requisito, si no…
– Si no, se contagia.
– Ja, ja, ja, ja, claro. “La buena vibra es una actitud, básicamente, es el nombre de la banda, pero al mismo tiempo es la actitud que quiero que tengan todo aquel que trabaje conmigo, pero también todo aquel que escucha mi música, que me contrata, que me lleva a un show, eso es lo que básicamente quiero trasmitir cada vez que digo “Damian y la buena vibra”.
Así mismo cómo se comporta, así escribe sus canciones. Canciones llenas de alegría, euforia y, sobre todo, pasión. Por ejemplo, su pasado disco titulado “El mundo está loco” un sencillo hecho precisamente para salir del aburrimiento en el que vivimos diariamente y darle ese toque de felicidad que necesitamos.
– Si tú escuchas “El mundo está loco” que fue mi anterior sencillo, yo lo que quería trasmitir de ahí era alegría y que la gente se sollara, que cuando viera alguien el video pues, pudiera sonreír. Eso en ese momento era “el mundo está loco”.
– De nuevo, felicitaciones por tu nuevo sencillo. Hablando acerca de este, “Pensando en ti”, ¿Qué esperas con este último lanzamiento?
– Bueno, lo que siempre espero con mi música, llegarle al corazón de todo aquel que la pueda escuchar, sea en Barranquilla, en Tokio, en New York, en Cartagena, en todos lados. Simplemente tocar el corazón de esa persona y que mi música le sirva de inspiración para tocar el corazón también de otros, dedicarla, compartirla, alegrar la vida de otros, poder enamorar a otra persona, para eso quiero que sirva mi música. Y al mismo tiempo, eso también puede servir para cambiar el mundo, para cambiar un poquito este mundo agresivo que nos ha tocado vivir. Ser un agente de cambio, de alegría, de felicidad para todo aquel que escuche mu música.
Si me coloco a transcribir todos los agradecimientos que da por su último disco, me extendería demasiado. Damian, es un hombre muy agradecido por la vida y todas las personas que lo han apoyado en su carrera musical. Le agradece a todo su equipo de trabajo y a todo a todo aquel que lo ha ayudado a ser quien es hoy como persona y como artista.
– Agradecimientos por el último sencillo.
– ¡Uy! Muchísima gente. A todo mi equipo de trabajo. A mi director musical, por ejemplo, Rodolfo Páez que también está ahí, pendiente de todos los detalles musicales con toda mi banda. A toda mi banda. A las personas que produjeron mi canción, Dj Keywar y a Jossi Días. Al productor del vídeo de la canción, Wilson Ferrer. Yo tengo como filosofía de vida la gratitud, yo siento que cuando tu agradeces, la vida te cambia o por lo menos el momento que estás viviendo, te cambia. Hay que agradecer así te pasen cosas malas porque por algo te pasa lo que te pasa. Agradecer por lo bueno, por lo malo, por la gente que trabaja conmigo, por la familia, por todo aquel que decide escuchar tu música. Eso es básicamente.
Hoy cocimos un poco acerca de quién es Damian dentro del mundo musical y fuera de este, su gran tu talento, actitud como persona y su buena vibra, aseguro yo, le bastaran para que dentro de muy poco, su música vuele y se escuche en todos en todos los rincones de la tierra.