Por Gabriela Marrugo, Juan Payares y Cristina Silvera
Las directivas del Instituto Alexander von Humbold impiden el libre desarrollo de la personalidad de sus estudiantes.
La institución que fue reconocida hace menos de un año como el mejor colegio del país sanciona de manera desproporcionada el porte de accesorios, algunos cortes de cabello y usos determinados del uniforme.
Una estudiante le contó a El Punto que la coordinadora de convivencia le prohibió la entrada a clase durante varios días por haberse realizado un peinado de tipo balayage.
El testimonio de una egresada reafirmó el argumento sobre la disciplina excesiva del colegio. “Varias veces me llamaron la atención por llevar aretes inadecuados, las uñas con colores inapropiados según lo que ellos creen conveniente o accesorios que no combinaban con el uniforme”, contó Isabella Trujillo.
El Punto trató de contactar a las directivas del colegio, específicamente a Elsy Castro, coordinadora de disciplina, pero la funcionaria se negó a responder.
La Corte Constitucional ha fallado a favor de los estudiantes en casos similares a los denunciados en este reportaje. Según la sentencia T-656 de septiembre 03 de 1999, las instituciones no pueden negar el derecho fundamental a la educación aplicando reglas que atenten contra derechos tales como el libre desarrollo de la personalidad.
El caso de Claudia Morales Sánchez fue emblemático. Interpuso una tutela en el año 2007 en representación de su hija contra el colegio Externado Nacional Camilo Torres porque le negó la inscripción por tener un piercing.
La Corte dispuso: “Las medidas que imponen restricciones a la apariencia personal de los educandos son inconstitucionales, por ser violatorias del derecho fundamental al libre desarrollo de la personalidad (C.P., artículo 16)”. Y agregó: “el uso de dichos accesorios no afecta de manera alguna el desarrollo académico de la menor y hace parte del derecho a la propia imagen”.
Parece haber una diferencia en cómo la educación pública y privada manejan el libre desarrollo de la personalidad de sus estudiantes.
“Las niñas pueden usar sus uñas pintadas o un tono en el cabello distinto o llamativo. Los niños pueden asistir con el cabello largo y esto no implica un problema para ellos”, expresó la pedagoga infantil y psicóloga Alejandra Herdenez sobre su experiencia con colegios privados. “La cuestión está en cómo se ponen en práctica las normas y sanciones”, agregó Herdenez, quien aseguró que al momento de entrar a una institución se debe leer el manual de convivencia.
Cabe resaltar que las instituciones educativas deben ajustar sus manuales de convivencia a las normas nacionales. El Ministerio de Educación, institución encargada de garantizar los derechos estudiantiles, fue claro al señalar que todas las prohibiciones y las sanciones que busquen imponer patrones estéticos o cuestionar la apariencia de los estudiantes deben ser eliminadas.
En el instituto Humboldt, son los hombres quienes tienen más problemas por el corte de cabello, dijo la egresada Isabella Trujillo. Un estudiante varón de la institución, quien prefirió mantener su testimonio anónimo, dijo: “Me vi afectado porque me dijeron que me iban a bajar en unos indicadores axiológicos en los que se involucra la presentación personal”.
La Corte ha revisado por más de treinta años casos de estudiantes que tuvieron problemas por usar cabello largo. Jaime Pelaéz y Gonzalo Perdomo interpusieron en 1992 una acción de tutela en la ciudad de Neiva, Huila. La corte falló a su favor. Según la sentencia T-065, las instituciones educativas no militares no pueden vulnerar el derecho a la educación por la longitud del cabello.
El Punto también obtuvo testimonios relacionados con problemas por el porte del uniforme. “Una vez no me dejaron ingresar porque llevaba medias muy cortas”, dijo la egresada Trujillo.
Al respecto, el Ministerio de Educación estableció en la directiva 07 de 2010 que el que un estudiante no tenga las condiciones económicas para portar correctamente el uniforme no debería ser motivo para prohibir su entrada.
Según la circular 3 de 2014 “está prohibido realizar cualquier tipo de actuaciones discriminatorias, humillantes o degradantes a un estudiante por el hecho de que no porte el uniforme”.
La psicóloga Hernedez dijo que es necesaria una reforma en los manuales de convivencia para que no atenten contra la libre expresión de la personalidad. “Nada debería estar por encima de la Constitución”, concluyó.