En plena época electoral, nuestro Junior de Barranquilla es para que estuviera brillando de veras, dando sensaciones agradables de firmeza, como para hacer más fácil el traslado de bondades por el efecto halo, y las urnas se llenen, ahorita en marzo, de ogullosos rojiblancos agradecidos.
Pero va a tener que buscar otras alternativas el técnico Juan Cruz Real, que así como gusta de lucir camisas sudadas para transmitir la idea de que es un camellador, así mismo debe mover las fichas de su equipo para convencernos de la idea de que es un entrenador de verdad.
Decimos que es raro porque tiene una nómina sobrada, con muchos jugadores de los que puede echar mano para armar un tremendo onceno, y anda es del timbo al tambo tratando de quedar bien con la prensa deportiva local y con los hinchas gritones del Estadio. Él debería tener claro que los demás analizan los partidos luego de ocurridos, y cada cual cree saber, después de rayo caído, para dónde debió de haberse movido el que recibió la descarga en el cogote. Tonterías: es él quien debe jugársela, y si pierde, pues pierde con la suya,
Pero se le ve inseguro: prefiere jugar con Rosero que con Martínez para hacer dupla con Arias en el centro de la defensa. Pareciera que le gustara el jugador que masque chicle, y eso debió ser el motivo por el cual vimos a Borja en esas durante el partido que perdieron con Once Caldas 1-0 en el Palo Grande de Manizales. Por lo menos, no era necesario en el caso de él, porque Uribe -su competidor- está lesionado.
El equipo necesita mayor balance. Didier Moreno luce como un titán, pero en solitario. Necesita alguien que lo apoye. Larry Vásquez no eran gran vaina, pero en eso sí era bueno. Este sábado, Didier recibió tarjeta amarilla y jugó condicionado. Rosero fue cambiado por Martínez a la fuerza, y Sambueza ya no daba más (ni en físico ni en calidad) cuando lo sacaron para darle paso a Giraldo. Quizás este debio de estar desde el principio para darle mejor equilibrio al equipo, pero bueno…
Caldas, empezó un poco antes sus cambios para refrescar cerca del minuto 70: Mejía ingresó por Rodríguez. Luego del de Sambueza (que fue casi enseguida), Caldas hizo dos más: Pérez y Carreazo se retiraron para dar paso a Quinoñes y Barbaro. Y el último fue el ingreso de Del Valle por Valdéz al minuto 84. Y vino el cabezazo magistral de Córdoba para el 1-0 en el minuto 87 (el ex tiburón Piedrahíta se le puso servida). Cuando entró Carmelo Valencia en Junior por el cansado Moreno, ya no había nada qué hacer.
Esperemos que regrese Cariaco González para que con Didier, Giraldo y Cetré armen un cuatro de mediocampo interesante. El de arriba puede ser cualquiera de los dos colosos, y Viáfara es mucho mejor que los demás como lateral por la derecha. Se ve simple, pero el que sabe es el técnico. Ni modo.
