Por: Wilbert Daw
A lo largo de la historia de la selección Colombia de mayores, 10 entrenadores extranjeros han pasado por el banquillo ‘Tricolor’. Sin embargo, dos de esos seleccionadores ‘foráneos’ han venido del ‘viejo continente’, exactamente de la zona de los Balcanes. Con la definida incorporación del portugués Carlos Queiroz al combinado patrio, se da el momento propicio para recordar a los ‘embajadores’ europeos que en algún punto manejaron los hilos del onceno nacional.
La mano de Toza Veselinovic
Aunque realmente su nombre era Todor Vezelinovic, en nuestro país siempre se le llamó ‘Toza’, apodo que ya traía desde territorio yugoslavo. Toza fue un espigado delantero que representó a Yugoslavia en dos mundiales de fútbol (Suiza 1954 y Suecia 1958) que militó en clubes como el Partizan de Belgrado y la Sampdoria de Italia. No obstante, su carrera desde los banquillos la inició en Colombia en 1969, cuando tomó las riendas de Independiente Santa Fe.
Su mano fuerte en los entrenamientos y unas peculiares innovaciones tácticas, especialmente de forma defensiva, llamaron la atención de la Federación Colombiana de Fútbol, entidad que solicitó sus servicios para orientar al cuadro ‘Cafetero’.
La era de Toza comenzó un 29 de marzo de 1972 con un amistoso en Bogotá frente a Perú en el estadio El Campín. Ante los ‘Incas’, que venían de cumplir con una buena participación en el mundial de México 1970 llegando a cuartos de final, Colombia sacó un empate 1-1. El atacante cartagenero Jaime Morón anotó aquel día para la ‘Tricolor’, que por esos días jugaba con un uniforme color zapote. Por otro lado, Juan José Muñante igualó para los peruanos.
El tiempo del oriundo de Novi Sad (Actual Serbia) culminó en 1973 en el marco de las eliminatorias al Campeonato del Mundo de 1974, a celebrarse en Alemania occidental. Colombia compartió grupo con Ecuador y Uruguay, terminando el clasificatorio de manera invicta con tres empates y una histórica victoria sobre los uruguayos en Montevideo por 0-1 gracias a un gol de Willington Ortíz, siendo la primera vez que la ‘Celeste’ perdía en su feudo por eliminatorias. A pesar de esto, los ‘Cafeteros’ se quedaron sin su boleto al mundial debido a que Uruguay vapuleó 4-0 a Ecuador en la última jornada y accedieron al certamen orbital.
Como apunte, Toza Veselinovic se hizo cargo también de la selección olímpica de fútbol que participó en los J.J.O.O. de Múnich 1972, donde Colombia salió acribillada por Polonia (5-1) y Alemania Oriental (6-1) y recuperó parte de su honor con un 3-1 sobre Ghana.
Aunque los números muestran que el proceso de Toza no fue fructífero -Solo ganó 2 de los 13 partidos que disputó-, su influencia se considera de suma importancia para el desarrollo del fútbol colombiano en cuanto a métodos de entrenamiento y de táctica se refiere. Tras su salida de la selección, Toza continuó su carrera en varios clubes -entre ellos Millonarios- e incluso se hizo cargo de la selección de Yugoslavia entre 1982 y 1984.
Blagoje Vidinic, del pizarrón al maletín
El otro entrenador europeo que orientó a la selección Colombia fue Blagoje Vidinic que, a pesar de ser yugoslavo, era algo diferente al perfil de Toza Veselinovic. Vidinic también tuvo una carrera decente como futbolista, siendo portero en clubes yugoslavos, suizos y estadounidenses -En USA se ganó el apodo de ‘Barney’-. Además, defendió el arco de la selección de su país por varios años, jugando en la Copa del Mundo de Suecia 1958 y en la Eurocopa 1960.
Vidinic comenzó su andar como entrenador de Marruecos, trazándose como objetivo la clasificación al mundial de México 1970. El oriundo de Macedonia lograría meter a los marroquíes al certamen orbital y dejarían una buena impresión con su fútbol a pesar de perder 2-1 ante Alemania occidental, 3-0 frente a Perú y sacar el primer punto de un país africano en un mundial ante Bulgaria (1-1).
Cuatro años después, ‘Barney’ Vidinic llevaría a la selección de Zaire -Actual República Democrática del Congo- a su primer y único campeonato del mundo (Alemania 1974) contactado por el dictador de aquella nación Mobutu Sese Seko, usando al equipo nacional como propaganda política de su gobierno. Zaire chocó en suelo alemán ante Brasil, Escocia y Yugoslavia. Los ‘Leopardos’ cayeron 0-2 ante Escocia, 9-0 ante Yugoslavia y 3-0 frente a los brasileros.
A pesar de los malos resultados en aquel mundial, Alfonso Senior, presidente de la Federación Colombiana de Fútbol en aquel entonces. Senior le dio la confianza a Vidinic bajo una curiosa premisa: Si fue capaz de clasificar a Marruecos y Zaire, ¿por qué no iba a poder clasificar a Colombia al Mundial?; contratándolo para fortaceler el trabajo de divisiones menores en el fútbol colombiano y pensar en un proyecto a largo plazo.
Así las cosas, la era de Blagoje Vidinic en la ‘Tricolor’ comenzó un 15 de octubre de 1976 en Bogotá, con un amistoso frente a Uruguay. Allí, Antonio Ríos adelantó a Colombia en el tanteador, pero Waldemar Victorino y Rodolfo E. Rodríguez voltearon el marcador a favor de los ‘Charrúas’ (1-2).
El mal arranque de Blagoje con Colombia se extendió a las eliminatorias al Mundial de Argentina 1978, donde Colombia compartió grupo con Brasil y Paraguay, sacando 2 empates y dos derrotas. De esa clasificatoria bajo el mando de Vidinic se recuerdan los dos juegos ante Brasil. El primero, un 0-0 en el El Campín de Bogotá, quedó para el recuerdo por una frase de Osvaldo Brandao, entrenador del ‘Scratch’, acerca del empate frente a los ‘Cafeteros’: “Nosotros no perdimos dos puntos hoy, ganamos uno en la altura”. No se había montado al avión de regreso a territorio brasilero cuando Brandao recibió su carta de despido por parte de la Confederación Brasileña de fútbol.
El otro choque fue el ya recordado 6-0 que propinó Brasil a Colombia en Río de Janeiro donde el ariete Eduardo Emilio Vilarete se sentó encima del balón en medio del gramado del estadio Maracaná de Río de Janeiro, un gesto que fue considerado un acto de cobardía por la mayoría los aficionados que vieron el partido.
No obstante, el proceso de Vidinic siguió en la Copa América de 1979, donde rivalizó a Chile y Venezuela en su zona. Las críticas cayeron sobre el macedonio por parte de la prensa colombiana, ya que el estratega le estaba dando más importancia al trabajo físico que al juego del equipo. Colombia cayó en primera ronda al vencer en sus dos juegos de local por 1-0 y 4-0 a ‘Australes’ y ‘Patriotas’, respectivamente. Sin embargo, Un 0-0 frente a los venezolanos y la derrota 2-0 en Santiago ante los chilenos en la última fecha, le puso punto final a la participación de Colombia en el torneo y también al proceso de Blagoje Vidinic en la selección con 3 victorias en 14 partidos dirigidos.
Tras esto, Vidinic dejó los banquillos y pasó a ser amigo personal de Horst Dassler, hijo de Adi Dassler, quien fundó la conocida empresa deportiva ‘Adidas’. Dassler era presidente de la compañía por aquel entonces e hizo contacto con el macedonio en primera instancia durante el mundial de 1974 para colaborar pagando sobornos buscando la elección de Joao Havelange como presidente de FIFA. ‘Barney’ Vidinic siguió vinculado a FIFA y a Adidas haciendo negocios turbios y moviendo hilos en las altas esferas ejecutivas del balompié hasta su muerte en 2006 a los 72 años.