Esta tecnología, que consiste en un análisis computarizado del movimiento corporal que se realiza a través de unas cámaras opto electrónicas, se encuentra en el Hospital Niño Jesús de la ciudad de Barranquilla.
Con este laboratorio, los médicos podrán tener diagnósticos más precisos y acertados para detectar o descartar algún tipo de discapacidad física en niños, jóvenes y adultos.
La tecnología, que consiste en un análisis computarizado del movimiento corporal que se realiza a través de unas cámaras opto electrónicas, convirtiendo las señales ópticas en señales electrónicas, se encuentra en el Hospital Niño Jesús de Barranquilla.
Según el ortopedista infantil Jaime Maury, “el alcance que tiene este sistema es invaluable”. A través de unos marcadores corporales que se ubican en la anatomía del paciente, los doctores lograrán detectar los movimientos corporales que luego analizados por un software de última generación.
Así mismo, agregó que antes los niños, y las personas que padecían problemas de movilidad, debían ir al interior del país a realizarse este tipo de pruebas. Maury aseguró estos desplazamientos generaban grandes gastos para las EPS, los pacientes y sus familias.
“Con una inversión cercana a los $1.000 millones estamos brindando a los habitantes del Atlántico un servicio con la más alta tecnología que no representa mayor gasto para los pacientes”, afirmó el médico
Además de las áreas de ortopedia infantil y neuro-ortopedia, el laboratorio cubre también los protocolos de evaluación para pacientes amputados, pre y post quirúrgicos de reemplazos de prótesis de cadera y de rodilla, medicina ocupacional y laboral, así como en medicina deportiva, tal como los que cuentan los grandes clubes de fútbol, atletas y deportistas de alto rendimiento a nivel mundial.
La inauguración estuvo a cargo del viceministro de Salud Pública y Prestación de Servicios, Iván Darío González, en compañía del secretario de Salud del Atlántico, Armando de la Hoz, y la gerente del Hospital Niño Jesús, Karina Osorio.
