Por: Valeskha De La Hoz (valeskha). Fotos: Cortesía
Sonriente y con un abrazo cálido me recibe. Rafael Sánchez Anillo o ‘Rafa’ como lo llaman sus amigos más cercanos, viste una camisa blanca que asegura “recomiendan mucho para las fotos de la candidatura”.
En la Decanatura de Educación de la Universidad del Atlántico, donde hoy asesora a estudiantes en sus tesis de graduación, me contó acerca de sus inicios, sus logros y los planes que tiene para Barranquilla si llega a la alcaldía en estas elecciones.
A los 12 años llegó de Fundación (Magdalena), de donde es oriundo, y se instaló en la Puerta de Oro. Si algo no ha cambiado desde ese momento es que el sueño de crear un país con bases en la equidad y el respeto sigue presente en su sentir.
Llegó a Barranquilla con su hermana Rosa, después de que su padre lo impulsara a salir de su lugar natal. Con nostalgia recuerda: “Mi papá me dijo que tenía que salir del pueblo y ser alguien en la vida. Yo lloraba en la falda de mi madre, no quería dejar a mi familia, pero eso también fue un motivo para luchar”.
La llegada a la ciudad fue un choque cultural fuerte para él. Venía de un municipio con muy pocos habitantes y rodeado de la naturaleza, el río, los animales, la tierra y el aire puro; en Barranquilla encontró urbanidad. “Conjugar el campo y lo urbano me han dado una visión de ciudad muy diferente. Me preocupa mucho el cuidado del medio ambiente”, afirma el ex concejal.
Se define como un educador que practica el amor, es creyente en Dios, honesto y soñador de la justicia y de la equidad. Amante del vallenato costumbrista, especialmente de los clásicos de Juan Polo Valencia, tranquilo, y rodeado de muchos libros, se considera barranquillero por los más de 20 años que ha dedicado a la ciudad en diferentes cargos. “Barranquilla es una ciudad hermosa, estoy orgulloso de estar aquí.
Le he dedicado muchos años y creo que me falta aportarle mucho más”, dice Sánchez. Fue Secretario de Educación en dos periodos, concejal de la ciudad en cuatro periodos, candidato a la Alcaldía (2016-2019) y este año es candidato una vez más.
Su papá lo inscribió en el Colegio Pestalozzi, y allí fue presidente del consejo estudiantil por muchos años. Al llegar a la Universidad del Atlántico a estudiar Matemáticas empezó a liderar varios movimientos estudiantiles. Pero fue solo tiempo después mientras trabajaba como maestro en el Centro Social Don Bosco, que su carrera política empezó.
“El padre Hoyos era un sacerdote salesiano que llegó a la ciudad promoviendo la filosofía de Paulo Freire. Con su llegada, las comunidades más vulnerables se sintieron identificadas con él y lo llevaron a la Alcaldía”, recuerda el candidato. Al llegar a la Alcaldía, Hoyos le extendió una invitación para que hiciera parte de su gobierno en el cargo de Secretario de Educación.
El ex Secretario señala que una de las influencias que el padre Bernardo Hoyos le dejó fue: “El poder formarme por la filosofía de la pedagogía de la liberación, eso era básicamente, concientizar al ciudadano para que sea transformador social desde su propio contexto” y agregó: “ Al igual que yo, hoy la gente de los sectores populares añora esa praxis política donde se sentía que había un alcalde popular, que no solo se preocupa de la ciudad sino de su gente”.
Muchos lo recuerdan como “El educador” gracias a los proyectos que llevó a cabo durante sus periodos como Secretario de Educación. Uno de los más importantes fue el de la educación para adultos. “Fueron 20 mil jóvenes y adultos que no habían terminado sus estudios y que eran delincuentes, drogadictos o reinsertados de las fuerzas armadas y les dimos la oportunidad de superarse a través de la educación”.
Para Rafael Sánchez, la educación siempre ha sido el eje de transformación para el avance de las comunidades pobres. Para él,“con una persona que llegue a la universidad en una familia pobre, se trunca la transgeneración de la pobreza y la miseria de esa familia”. También recordó que en su cargo de Secretario nombraron a 2.300 maestros. “Son hoy 2.300 familias que tienen calidad de vida y riqueza humana que fue generada a través de la educación”.
Es por eso que en su faceta como padre ha logrado enseñarle a sus hijos, Andrés David, de 23 años, Ingeniero y Rafael, de 21, estudiante de Administración de Empresas, la importancia de la educación para la vida. Nostálgico relata que la labor con la sociedad muchas veces lo ha llevado a sacrificar momentos importantes con la familia. “No hay día ni hora, ni sábados o domingos, salir desde las seis y llegar a las doce. Nunca se sacrifica el afecto por mis hijos pero tal vez sí el acompañamiento material”.
De allí que sus retoños no decidieran seguir el legado del político. Sin embargo manifiestan una gran admiración por su papá. “Me ven como su ídolo. Me dicen: Papi, lo que haces tu no lo ha hecho nadie, rompes paradigmas y te lanzas al vacío con seguridad”, comentó orgulloso Rafael.
El gerente de Barranquilla
Visiona a Barranquilla como una gran empresa, donde él pueda administrar sus recursos y velar por los derechos fundamentales de cada ciudadano. Por esta razón enfatiza que “la palabra alcalde está obsoleta. Fue una palabra que nos impusieron los españoles. Yo quiero ser el gerente de esta ciudad”.
Su gerencia consistiría, según describe, en trabajar para mejorar la inseguridad, la crisis laboral, la movilidad y la salud pública desde el lado social. “El tema social es mi enfoque principal para esta candidatura a la alcaldía, pues tenemos una ciudad muy hermosa en infraestructura, pero en cuanto a desigualdad hay una brecha social gigante”, señala el Licenciado.
En épocas recientes el ex Concejal escribió un carta abierta para el actual alcalde, Alejandro Char, en la que expresa su preocupación por el tema de inseguridad en la ciudad. Sánchez considera que esta problemática está siendo tratada de la forma incorrecta.
“En los últimos gobiernos han solucionado el tema con más policías y con más cámaras de seguridad.Tratan de solucionarlo desde la consecuencia. Yo propongo atacar la causa a través de la inversión social. Garantizando un proceso de educación popular para aquellos que están en la droga y la delincuencia y para los inmigrantes que llegan a nuestra ciudad”.
Este proceso se llevaría a cabo a través de la identificación de las pandillas y las bandas delincuenciales, y la capacitación y desintoxicación de las mismas, ofreciéndoles opciones laborales. Estas opciones laborales son, en palabras del candidato, escasas y es otra de las problemáticas que propone abarcar en su gobierno mediante la alianza del sector privado y el sector oficial.
“Hoy la vía 40 es un cementerio, muchas de las fábricas que veíamos hace años ya no están. La ciudad se ha des-industrializado y es necesario generar un estatuto tributario que garantice una mejor ciudad para las empresas y esos se refleje en empleo y en calidad de vida”.
Una de las propuestas más retadoras es la gratuidad del servicio de agua y alumbrado público en estratos uno y dos. Frente al tema de la movilidad, propone mirarlo desde el punto de vista del ciclista, el taxista o el conductor, y no solo desde la perspectiva del peatón, como se ha hecho en los últimos gobiernos.
Sabe que en estas elecciones se enfrenta a la continuidad de gobierno propuesta por el actual alcalde a través del candidato Jaime Pumarejo. Además agradece que tengan la ciudad muy bonita, “pero se sabe que detrás de todos esos contratos hay familias que se han vuelto más ricas, y otras que se han vuelto más pobres.”
Su campaña actual se diferencia de la anterior ya que esta vez propone más soluciones que criticas. Espera ser el primer ‘Gerente’ de la ciudad que no le dé la espalda a el Puerto de Barranquilla, ya que para él, actualmente nadie responde por el Río Magdalena. Entre sus planes está presentar una autoridad portuaria para potencializar el puerto y finalmente rescatar el nombre de “La puerta de Oro de Colombia”.
El lema de esta campaña es ‘Seguimos en el progreso’. Para el candidato, la ciudad ha progresado en materia de infraestructura, pero ya es tiempo de que exista un avance social real, proceso que él quiere liderar.