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“Las redes sociales como pueden darte éxito también pueden destruirte”: Lucas De La Rosa

“Las redes sociales como pueden darte éxito también pueden destruirte”: Lucas De La Rosa

Por: Eliana Ortega/foto tomada del Twitter de @lucasdlarosa. 

Lucas De La Rosa es un Tuitstar e Instagramer barranquillero que se ha hecho viral por su contenido jovial y auténtico. La persona tras este personaje intenta no mezclar su vida personal con lo que muestra en las redes sociales. Lo poco que conocemos es su profesión, Relaciones Internacionales, la que él ve que no tiene relación con su vida de influencer.

La cuenta @lucasdlarosa en Instagram y Twitter es una parodia a Lucas De La Rosa de la telenovela colombiana Chepe Fortuna (emitida en 2010 por RCN) y Casa de reinas (emitida en 2012 por RCN). Lucas nos comenta que antes de escoger a esta figura ya tenía pensado en abrir una cuenta parodia en Twitter y sus dos opciones eran la “Peliteñida” Patricia Fernández de Betty la Fea y Lucas, pero se decidió por este último al ver que no había un personaje homosexual en el Caribe y también porque llamó su atención por lo jocoso y caribeño que le resultaba.

Además de esas dos características, Lucas es extrovertido y seguro de sí mismo, cree que su manera de comunicarse se asemeja a la del personaje que interpreta. “Yo soy muy directo, franco, honesto y eso es lo que transmito o trato de transmitir en mis redes sociales tanto de manera escrita por Twitter como en las historias de Instagram”. También afirma que su personalidad no es completamente como la de Lucas De La Rosa, él trata de mostrarse en las redes sociales como una persona alegre, extrovertida y un poco afeminada pero no es tan afeminado ni jocoso como la gente cree, es un poco más serio, pero igual él cree que es un pelao mamador de gallo. Algo que le parece chévere es que lo vean en redes sociales con una personalidad arrolladora y cuando lo conozcan se sorprendan por no ser tan así.

Los contenidos que abordan en la cuenta de Lucas De La Rosa se caracterizan por su humor e innovación. “Últimamente me he dedicado a subir imágenes de algunas marcas reconocidas y lo que hago es que las relaciono con el Caribe, por  ejemplo, una modelo de Dolce & Gabbana comprando en un almacén y yo lo asemejo como si estuviera en Barranquilla o Santa Marta, en cualquier ciudad del Caribe”, explica Lucas. El influencer trata de evitar temas como política, religión y temas LGTBIQ, que a veces lo comenta porque es parte de la comunidad, pero trata de no hacerlo para no generar discusiones en las redes sociales.

En Twitter cuenta con más de 267 mil seguidores y en Instagram más de 98 mil. El influencer afirma que nunca se imaginó la acogida y todo el cariño que recibe de sus seguidores y menciona que estas cifras no significan mucho, “nunca me he puesto metas como, por ejemplo, esta semana quiero llegar a tantos seguidores,  lo que procuro hacer en mis cuentas es estar pendiente que debo subir algo que le guste a la gente y a mí”. Entonces las cifras para él son más que un recordatorio de que ha llegado a tantas personas y no es que signifiquen en su totalidad lo que representa su cuenta.

“Hace tres años recibía mensajes en los que me pedían una entrevista y decía que no, pero a medida que ha pasado el tiempo me he ido soltando”.

El inicio de Lucas De La Rosa fue en Twitter y después de unos años abrió su cuenta en la plataforma de Instagram porque le llegaban mensajes pidiéndole que se uniera. El influencer lo pensó mucho por lo diferente que son las plataformas y porque no sabía en qué enfocar la cuenta, también porque quería seguir siendo un personaje oculto, porque él cree que el éxito de la cuenta se debe a la intriga de saber quién es. “Decidí seguir así de incógnito hasta un punto, porque yo hace tres años recibía mensajes o llamadas pidiéndome una entrevista, y yo decía que no, pero a medida que ha pasado el tiempo me he ido soltando. Siempre les pido a las personas o donde me invitan pues que no me tomen fotos, o que si van a tomar fotos no se los manden a sus amigos, pero la idea del personaje siempre lo he dicho es permanecer oculto”.

Lucas aconseja a todos los que quieran incursionar en el mundo de instagram o en cualquier plataforma que sean originales, “sé que se va escuchar algo contradictorio ya que yo tomé a Lucas de una telenovela y lo convertí en un personaje en las redes sociales, pero los invito a que sean únicos, persistentes, que hagan contenidos que no se hayan visto”. Un ejemplo que da es Mildre Cartagena, una influencer que hace vídeos sobre la madre costeña. Lo único que se necesita para crear contenidos en las redes sociales es ponerle su sello y marca. Aunque las redes pueden darte éxito y popularidad también pueden hundirte, por eso Lucas recomienda ser cuidadoso con lo que se va a publicar, anunciar o promocionar.

La persona que está detrás de Lucas De La Rosa es minucioso en la redacción de un tweet o un párrafo en Instagram. Algo que cree que no puede romper es la confianza que tiene con sus seguidores por eso solo hace publicidad de cosas que de verdad le gustan y que sabe que funcionan, “hace unos días me escribieron al hotmail para promocionar un quemador de grasa y yo nunca en la vida he utilizado eso, pero como yo voy al gimnasio las personas se guían de lo que yo utilizo. Sabía que había dinero de por medio, pero rechacé la oferta porque no sería capaz de promocionar un producto que no se si funciona”.

El Tuitstar e Instagramer no tiene planes a futuro, pero a corto plazo piensa abrir un negocio por el incentivo de sus amigos que le dicen, “hey, deberías montar un negocio, ya que tiene tu clientela ahí y por decirlo así, sé que tienes mucha gente ahí conectada, te van a copiar o les va agradar lo que tú que vayas a hacer con respecto a eso”.

 

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