Por: Lina Vega
Tal vez el primer paso para saber si la paz que todos los colombianos buscamos, independientemente de nuestra postura política, es cambiar las acciones violentas por las armas de la educación y el diálogo. Por eso, el espacio que este miércoles 21 de septiembre se dará en Uninorte, será un campo minado, no de bombas antipersona sino de ideas. En una coalición interdisciplinar entre politólogos, comunicadores, filósofos, psicólogos, historiadores, abogados, etc., así como de estudiantes de todas las disciplinas, se preparó una Lecturatón de los Acuerdos de Paz, y se espera que toda la comunidad educativa participe desde las 8 de la mañana hasta las 6 de la tarde en diferentes lugares de la Institución. Se harán sesiones de dos horas, en cada una de las seis mesas para los diferentes acuerdos donde los estudiantes, acompañados por docentes, leerán y analizarán de qué se trata cada Acuerdo y luego propiciarán un momento de intercambio sobre las ventajas y los retos en cada punto.
De esta manera, al dejar a un lado la polarización violenta que ha surgido a partir de la oportunidad de votar Si o No en el plebiscito, la academia le apuesta a crear un espacio de reflexión y diálogo que capacite a la comunidad educativa para conseguir un voto informado. Para que ya no se trate de las declaraciones de algunos políticos, de especulaciones, de insultos en redes sociales, de peleas con familiares y amigos, de silencios por no ser capaces de reconocer nuestras posturas ante otros, sino de saber con certeza ¿por qué estoy votando?
Por esto, como estudiante de la Maestría en Comunicación y egresada del programa del mismo Departamento, me alegra poder presenciar y jugar un rol activo en este momento histórico para el país. Cualquiera que sea el resultado después del 2 de octubre, sé que lo que sigue para Colombia no estará en manos de los dirigentes o de las FARC; sino que todas las ideas de quienes apoyan los acuerdos o de quienes proponen otras vías, sólo se podrán materializar desde aquí, desde lo local, desde las aulas de clase, los hogares, las iglesias, los grupos comunitarios, desde iniciativas como ésta que promuevan intercambios de ideas por vías pacíficas.
Para los que no hemos sacado el tiempo aún de leer por completo los Acuerdos, debemos estar conscientes que es cierto que dar el voto sin estar informados sería aún más irresponsable que no salir a votar. Por eso, este miércoles, pienso ir por cada espacio donde se leerán los Acuerdos, armada de escucha, ideas y diálogo, para que el día del plebiscito al momento de ejercer mi derecho como colombiana, pueda decir que mi voto está contribuyendo a crear el país que yo anhelo.
