La primera ministra británica, Theresa May, anunció que el Parlamento ejercerá el derecho al voto por el “Brexit para decidir si desean o no cumplir con un acuerdo que responde al resultado del referéndum de junio de 2016 y la protección de los empleos.
Tras varios días de especulaciones, la premier conservadora confirmó que para dicha fecha se realizará el “voto significativo” en la Cámara de los Comunes.
May compareció después que los veintisiete países que conforman la Unión Europea dieran visto bueno al acuerdo ya ratificado por la Cámara y por el Parlamento Europeo.
Hace unas semanas atrás no solamente hubo un respaldo con respecto al Brexit, sino también la Comisión Europea hizo público el texto de más de 500 páginas que expone los términos de la salida del bloque económico previsto para marzo de 2019.
De la misma manera, la renuncia de varios miembros del gabinete de su gobierno con la posibilidad de que incluso la ministra misma dejara a un lado el acuerdo de una vez por todas.
Otras opciones a destacar fueron que un voto contra el proyecto podría implicar que no se ejecute el Brexit como tal desde salir de la Unión Europea sin acuerdo alguno o generar una unión y respaldar el mejor acuerdo posible.
Aún con la controversia la UE declaró que es una opción viable para el futuro del Reino Unido y ya se ha establecido un mecanismo de seguridad por el cual se mantendrá una solución que preserva la unidad territorial británica, tal como argumentó la ministra junto con las autoridades de Irlanda del Norte.
Tras el anuncio, la mandataria se sometió a las preguntas de los diputados tratando de persuadirlos para votar a favor del Brexit. Previo a la jornada, se llevará a cabo un debate a partir del próximo martes 4 de diciembre.
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