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Por: Wilbert Daw

Lo que era un rumor bastante fuerte terminó siendo una realidad. La División Mayor de Fútbol Profesional Colombiano (DIMAYOR) dio por finalizada la Liga Profesional Femenina 2019 y le da una fuerte estocada al desarrollo del balompié de las mujeres en nuestro país.

Así lo hizo saber la entidad regidora del fútbol colombiano el miércoles anterior, echándole más leña al fuego a la problemática del balompié femenino y que despertó aún más la indignación pública en contra de una institución como la Dimayor -en compañía de la Federación Colombiana de Fútbol (FCF)- que parece hacer todo lo posible por acabar con el fútbol femenino.

La razón que entregó Jorge Enrique Vélez, presidente de la Dimayor, para no realizar liga profesional femenina este año es que no ha habido apoyo por parte del sector privado para llevar a cabo el torneo. Eso es completamente cierto. Sin embargo, no son los únicos responsables.

Los clubes tampoco han puesto mucho de su parte para apoyar a las mujeres. Muchos de los equipos femeninos no contaban con los implementos básicos para entrenarse y algunos de los afiliados a Dimayor simplemente formaron una sociedad con clubes femeninos y eran los segundos los que corrían con los gastos de su liga.

Dos de esos casos fueron Envigado y Cúcuta Deportivo, quienes compitieron en los dos torneos femeninos usando las plantillas de los clubes aficionados Formas íntimas de Medellín y Gol Star de Bogotá, respectivamente. Así, compitieron bajo el nombre de ‘Envigado Formas íntimas’ y ‘Cúcuta Gol Star’.

Debido a una ley de la Confederación Sudamericana de Fútbol (CONMEBOL) en la que no se aceptará la participación de equipos en los torneos organizados por dicho ente (Copa Libertadores, Copa Sudamericana, Recopa Sudamericana) si no poseen un equipo femenino, la Dimayor está obligada a hacer un torneo, pero está determinado de que sea una liga semiprofesional y con dos fuertes restricciones.

La primera, solo podrán participar jugadoras menores de 24 años y cada equipo únicamente puede inscribir 6 futbolistas con edad libre. La segunda, no se aceptarán la inscripción de jugadoras extranjeras.

Estas medidas afectan profundamente la calidad de la liga. La posibilidad de que los equipos cuenten con plantillas menores de 24 años es una clara reprimenda contra la actual generación de futbolistas que integran la selección Colombia femenina de mayores y va de la mano con las declaraciones hechas por Álvaro González Alzate, miembro del Comité Ejecutivo de la FCF, en la que sostuvo que acabaría con las ‘Chicas Superpoderosas’.

Además, el fútbol colombiano se priva de contar con jugadoras extranjeras que exhibían un gran nivel en sus equipos y eran pilares en cada una de sus escuadras como el caso de la paraguaya Fanny Gauto, la venezolana Oriana Altuve, las costarricenses Cristín Granados, Melissa Herrera y Daniela Solera; entre otras.

Por otra parte, apoyadas por la Asociación Colombiana de Futbolistas Profesionales (Acolfutpro), 13 jugadoras presentaron pruebas acerca de los sucios manejos dentro de las directivas de la FCF donde se demuestra que la Federación sí sabía de las denuncias hechas por la jugadoras pidiendo mejor trato en las concentraciones y equidad laboral.

Además, sacaron a la luz un audio donde se escucha a Álvaro González Alzate realizando un veto a Daniela Montoya, quien estuvo un año y medio sin ser convocada a la selección por pedir el pago puntual de premios al plantel tras participar en el Mundial de Canadá 2015.

Pero las paradojas de la Dimayor y la FCF no terminan aquí. Mientras ambas instituciones se empeñan con acabar el fútbol femenino, envían mensajes de ‘Feliz Día de la Mujer’ por redes sociales que, claramente, hacen gala de la cultura macondiana de nuestro país.

Más paradójico resulta para la discusión que, aunque los dirigentes del fútbol sostienen que en los dos primeros campeonatos de fútbol femenino profesional se produjeron muchísimas pérdidas económicas para los clubes y que no es rentablemente viable, dicho torneo se encuentra dentro del contrato de partidos establecidos por Dimayor y Win Sports que se transmitirá a través del canal premium a partir de julio de este año y que para poder verlo se deberán pagar 30 mil pesos mensuales en el servicio de televisión por cable.

Allí se incluye que el canal deberá televisar un partido de la liga femenina, evidenciando que, para los dirigentes de nuestro balompié, el fútbol femenino les conviene para algunas cosas y otras no.

Lo peor de todo es que no se observa una iniciativa clara de salvar al fútbol femenino de este agujero sombrío. No hay nadie que se haya ofrecido a colaborar o a poner la plata para el patrocinio del fútbol femenino. Ni siquiera Coldeportes, la entidad gubernamental que vela por el desarrollo del deporte en Colombia, muestra un apoyo concreto. “Si nos pintan una propuesta interesante, de inmediato hablamos con el presidente Duque y buscamos recursos.

El Gobierno tiene disposición”, dijo Ernesto Lucena, presidente de Coldeportes,al periódico El Colombiano mostrando que sí quieren la Liga femenina, pero solo si Dimayor y la FCF proponen algo. Es decir, da la impresión de que el apoyo parece quedarse en solo palabras.

Habrá que seguir pendientes de lo que suceda con el futuro del fútbol femenino de nuestro país. Se espera que haya una reunión entre Dimayor y FCF con las jugadoras en el día de mañana luego de que Carlos Queiroz, seleccionador del equipo masculino, dé su primera convocatoria a las 11:00 a.m. Eso sí, tanto la Dimayor como FCF pusieron la condición de que las futbolistas entren a la reunión sin la presencia de Acolfutpro, por lo que ya hay una latente tensión entre las partes.

Lo que espera el país futbolero es que el tema se solucione pues no es posible que en un país que logró consolidarse como uno de los mejores equipos de fútbol femenino en Sudamérica se estanque de esta forma y termine una gran generación de jugadoras que hicieron historia en el deporte colombiano por culpa del machismo dirigencial, de caprichos absurdos y la incompetencia de reconocer errores dentro del manejo de nuestro fútbol.

Foto: Federación Colombiana de Fútbol

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