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El pasado domingo 26 de agosto fue el episodio final de Sharp Objects, la adaptación de HBO basada en la novela debut de Gillian Flynn, conocida por ser la guionista de la película Gone Girl, dirigida por David Fincher, también basada en su libro del mismo nombre.

En este caso,“Sharp Objects” sigue la historia de Camille Preaker, interpretada por Amy Adams, como una reportera que regresa a su ciudad natal para cubrir el asesinato de dos chicas adolescentes y se adentra en el misterio mientras trata de sanar las heridas psicológicas que le dejó su disfuncional familia.

Dirigida y editada por Jean-Marc Vallée, quien anteriormente dirigió Big Little Lies, la serie ganadora de varios Emmys y aclamada por la crítica nos ofrece una perspectiva diligente y tan intensa como sus trabajos previos. Sharp Objects es una serie atrapante que explora los aspectos complejos y oscuros de los traumas femeninos y su relación con la violencia.

Flynn es muy conocida por sus personajes femeninos interesantes siendo su más famoso papel al interpretar a Amy Dunne, el personaje principal de Gone Girl, la película mencionada anteriormente. Las mujeres de las historias de Flynn son a menudo anti heroínas llenas de defectos que se aleja de los aspectos convencionales de las interpretaciones de las mujeres como víctimas en el cine y la televisión.

La serie se apropia de un lenguaje visual que, junto con el diseño del sonido, exalta la realidad física de la violencia mientras nos ofrece una visión atrapante de la psiquis de Camille al confrontar sus propios traumas. Sharp Objects es una serie como ninguna, una historia de misterio que explora la violencia femenina y el trauma de los recuerdos escondidos en la ciudad de Wind Gap.

Sin duda, la industria hollywoodense está obsesionada con las mujeres como víctimas abusadas y asesinadas, un análisis que es fácilmente identificable en las diversas películas y series de televisión, con mujeres convertidas en cuerpos violentados que sirven como narrativas para continuar historias masculinas.

Sin embargo, la serie altera brillantemente esta narrativa y la convierte en una historia poco convencional, mostrando una complejidad humana relacionada con el papel de la mujer en la sociedad, en donde se abren espacios con personajes femeninos complejos, violentos y evocativos de la maldad considerada particularmente una característica masculina.       

Al respecto, Flynn dijo que ella vive rodeada de una cultura Hollywoodense acerca de cómo los hombres manejan la violencia y la rabia, pero hay poco contenido acerca de cómo “las mujeres manejan su propia violencia”.

En lugar de esto, las historias femeninas por lo general presentan a las mujeres como madres de familia, víctimas de violencia o mujeres superficiales enfocadas solamente en la moda, por lo tanto ella estaba interesada en darle un diferente enfoque a sus libros.

En otra ocasión se mostrará si el próximo año Sharp Objects le concede a Amy Adams el Emmy por su buena interpretación de un personaje femenino complejo. Mientras tanto, existe una oportunidad para visualizar esta serie en la plataforma en línea de HBO.

Fotos: @HBO 

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