Foto tomada de: La FM
De acuerdo con el análisis del Observatorio de Educación de la Universidad del Norte, la tasa de cobertura bruta en educación superior en la región Caribe es de 35,5 %, lo que la ubica por debajo del promedio nacional (52,2 %) en 17 puntos porcentuales.
Asimismo, los resultados de las pruebas Saber Pro de 2020 muestran que el 20,6 % de los estudiantes evaluados de la región obtuvo puntajes que se pueden clasificar como muy bajos (entre 0 y 122 puntos de 300 posibles); la media nacional es de 15,4 %.
Al relacionar estos dos indicadores (cobertura y calidad) con el nivel de pobreza monetaria es posible identificar una relación positiva. Es decir, entre mejores indicadores tiene un departamento en educación superior, mejores son sus condiciones de vida. De este modo, por ejemplo, Atlántico, el departamento con menor pobreza monetaria de la región es el que tiene la mayor cobertura en educación superior (59,5 %) y el menor porcentaje de estudiantes con puntajes muy bajos en Saber Pro (17 %). En el otro extremo aparece La Guajira, que tiene el mayor índice de pobreza monetaria de la región y, al mismo tiempo, tiene la cobertura en educación superior más baja (21,4 %) y el mayor porcentaje de estudiantes con puntajes muy bajos en Saber Pro (40,7 %).
Para evaluar las competencias de los estudiantes próximos a culminar los programas de pregrado se utilizaron los resultados de las pruebas Saber Pro, que es uno de los indicadores más importantes de la calidad del sistema. Como se puede observar en el gráfico 2, en todos los departamentos de la región, el porcentaje de estudiantes en esta categoría de desempeño superó la media nacional (15,4 %).
Mucho por avanzar
Los indicadores educativos analizados corroboran una vez más la distancia que separa el centro de la periferia. También revela que al interior de las regiones se reproducen los mismos patrones de desigualdad que a nivel nacional. En términos de cobertura, por ejemplo, se observa una diferencia significativa entre la tasa del Atlántico y la de departamentos como la Guajira, Córdoba, Magdalena y Sucre. En estos últimos, solo uno de cada cuatro jóvenes de entre los 17 a 21 años está cursando un programa de pregrado.
“Desafortunadamente, a esta realidad se suma el hecho de que aquellos jóvenes que pueden acceder a la educación superior en nuestra región no necesariamente reciben una educación de calidad. A partir del análisis de los resultados Saber Pro 2020, se evidenció que un alto porcentaje de estudiantes de la región se clasificó en las categorías más bajas de rendimiento”, indicó Jorge Valencia Cobo, coordinador del Observatorio de Educación de la Universidad del Norte.
Además, la clara relación evidenciada entre el índice de pobreza monetaria de los departamentos, sus tasas de cobertura y los indicadores de calidad, revela una vez más los vínculos de interdependencia que existen entre la educación (superior y de calidad) y las condiciones socioeconómicas de una población (mediados seguramente por la variable del empleo).
“Es urgente concretar acciones que permitan que las IES departamentales de carácter oficial con menor nivel de cobertura, amplíen su oferta en el corto plazo, con coste cero para los más vulnerables y programas de formación pertinentes para el contexto actual. También se podrían generar incentivos para que IES privadas de calidad tengan mayor presencia en estos departamentos”, mencionó Valencia Cobo.
Asimismo, es fundamental robustecer los programas de subsidios a la demanda (becas) con esfuerzos de discriminación positiva hacia las regiones y departamentos que más lo necesitan. Programas del Gobierno central como Ser Pilo Paga y Generación E han tenido efectos positivos en acceso y equidad, pero son insuficientes para superar el rezago de nuestra región.
“Es necesario crear programas locales de apoyo educativo y social, que con recursos propios complementen a los programas nacionales. Deben tener condiciones flexibles de acceso y privilegiar a los jóvenes de más bajo ingreso familiar, seleccionándolos por mecanismos más precisos que los de orden nacional”, añadió el coordinador del Observatorio.