Una recomendación serial libre de spoilers.
Por: César Mora Moreau
La pareja está sentada en un restaurante discutiendo sobre su crimen más reciente y cómo continuar con su viaje. No son ni una versión joven de Bonnie y Clyde, ni una parodia de Thelma y Louise, son James (Alex Lawther) y Alyssa (Jessica Barden), los protagonistas de The End of the F***ing World, la nueva serie de Netflix basada en un cómic del mismo nombre que sin duda atrapa por la belleza de su fotografía – que recuerda al cine de Wes Anderson -, la música retro que acompaña la imagen y la retorcida historia de amor de sus protagonistas.
Estrenada el 5 de enero de 2018 a través de la plataforma de streaming, The End of the F***ing World es una comedia negra, con elementos del road movie, que cuenta la historia de James, un adolescente que se autodenomina como psicópata y que afirma no sentir nada. Sin embargo todo cambia cuando conoce a Alyssa, una chica que odia a todo el mundo y lo motiva a escaparse con ella.
Viajar a través de ciudades para huir de su vida. Viajar en una búsqueda familiar. Viajar para encontrarse con ellos mismos y experimentar emociones que antes no habían sentido. James y Alyssa son jóvenes inexpertos que se mantienen juntos en un mundo violento, a veces cruel, otras veces estúpido en el que los problemas familiares, el abuso sexual, el suicidio y los traumas de la infancia rondan en el aire.
“Esta no es una película. Si esto fuera una película probablemente seríamos estadounidenses” dice Alyssa y tiene razón, porque lo que estamos viendo en pantalla es una serie británica con tan solo 8 episodios, de veinte minutos cada uno, que puede (¡debe!) verse de un solo tirón.
Una pieza indiscutible de las que podrían catalogarse como las nuevas joyas del universo serial.
Aquí puedes ver el tráiler:
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