Por: Juan David Herrera
En el marco de las protestas por la muerte del afroamericano George Floyd a manos de un policía estadounidense, los manifestantes llegaron a los alrededores de la Casa Blanca, Washington D,C. Esto hizo que el Presidente Donald Trump se tuviese que refugiar en un búnker para proteger su integridad.
Desde la muerte de Floyd el pasado 25 de mayo, diversos sectores han salido a las calles del país norteamericano para mostrar su rechazo al crimen que consideran refleja el latente racismo todavía existente en la población.
Consignas como “Stop Racism” o “Black lives matter” abanderan las movilizaciones que han generado un efecto dominó en varias ciudades del país que se han sumado a las marchas. Una de ellas es Washington D.C. lugar que alberga a la Casa Blanca y en el que los manifestantes no tardaron en llegar.
Debido al volumen de las movilizaciones, el anillo de seguridad presidencial realizó el apagado de las luces del palacio de gobierno y sugirió al presidente resguardarse en un búnker.
Poco tiempo después Donald Trump sostendría, a través de un tweet que “nunca se había sentido tan seguro”.
