Foto de cabecera: Secretaría de Cultura Alcaldía de Barranquilla
Por: Rochell De Oro
Barranquilla tiene reina para el Carnaval 2018: Valeria Abuchaibe Rosales, es una barranquillera alegre, espontánea y bailadora.
Carnaval sin reina no es Carnaval. Cada año el máximo símbolo de la fiesta más importante del caribe colombiano cambia de rostro. En el 2018 el turno es para Valeria Abuchaibe Rosales, quien en compañía de Gaitas alegres, llamadoras tamboras, pitos atravesaos, flautas de millo y maracas va a prender la fiesta más grande del país.
La joven arquitecta, de 25 años, egresada de la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, es la encargada de portar por cuarta vez el título de reina en la familia Abuchaibe, un apellido que ya es sinónimo de Carnaval en Barranquilla, así que más barranquillera y más carnavalera imposible.
Parece difícil encontrar unos ojos que irradien tanta luz, y una sonrisa que se ensanche con tanto orgullo al hablar de Barranquilla, Carnaval, sabrosura y baile. Si existe una persona apegada y orgullosa de La Arenosa, sus costumbres y sus tradiciones, es la reina del Carnaval de Barranquilla 2018.El lema de su Carnaval #100tetemásbarranquillero, es su forma de invitar al pueblo currambero a sentirse más orgullosos de la ciudad, las tradiciones, la cultura. “Es importante demostrarle a la gente que te desvives por tu ciudad, que te desvives por el carnaval, porque cuando tú lo demuestras, la gente se contagia y eso es lo importante. El carnaval es llevar esa alegría, ese sabor, esa sabrosura que tenemos nosotros los barranquilleros y demostrarle a todo el mundo que barranquilla es especial por esto que tenemos”.
Una de sus mayores pasiones siempre ha sido el baile. Desde sus dos años pertenece a la Academia de Julie De Donado, donde también bailó su madre Gina Rosales. Pero fue a los 9 años cuando se sumergió de lleno en el mundo de los tambores, los disfraces, el sabor y la alegría. Desde entonces, la vía 40, la Casa del Carnaval y las academias de baile se convirtieron en sus hogares.
Actualidad y retos a futuro
Actualmente hace parte de la Fundación Red de Tamboreras de Colombia, dirigida por Jennifer Meza Mayorga y Grace Lazcano Garrido, artistas que cuentan con reconocimiento nacional e internacional por su vínculo con la música tradicional de Colombia. Así que el título de máxima soberana del Carnaval fue un proceso que construyó a lo largo de los años. “Yo he tenido una trayectoria carnavalera muy larga, creo que para ser reina del carnaval es muy importante la madurez, la edad te da madurez. Obviamente no estoy vieja, yo soy todavía una niña -aclara este tema con bastante seriedad pero finalmente una carcajada se escapa de sus labios- pues también ser profesional, digamos que tu asumes esto de una forma diferente. Porque esto es una gran responsabilidad”.
Sin embargo, tal como ella dice “el tiempo de Dios es perfecto” y no hubiese existido un mejor momento para que Valeria se alzase con el título, pues las carnestolendas del 2018 traen consigo un plus: serán el abrebocas de los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2018 que tendrán como epicentro a la capital del Atlántico.
Y, como si esto no fuera suficiente, también se cumplirá un siglo desde que Alicia Lafaurie Roncallo le dio rostro por primera vez a la Reina del Carnaval de Barranquilla: ¿Quién mejor que una mujer fuerte, madura, con empuje y experiencia para asumir el gran reto de conmemorar este hecho?
“Voy a darle un valor a la mujer, a el papel de la mujer en el carnaval por lo que hablamos de la figura número 100 de la reina” dice. Su tono de voz se torna más apasionado al hablar de este homenaje, y es que cuando una mujer reconoce su valor y su poder desea ayudar a sus semejantes a que también lo hagan. Por esta razón el próximo año no tendremos solo una reina sino cien más, “quiero coronar a 100 mujeres importantes de nuestro carnaval, mujeres que han trabajado para que esta tradición se mantenga, mujeres que le han aportado vida y tradición a nuestro carnaval”.
Se puede ver a través de sus ojos que en su mente está viviendo ese momento, probablemente se imagina hondeando la falda del hermoso vestido estampado que porta en el momento, rodeada de esas mujeres que recibirán ese hermoso reconocimiento. Luego de unos segundos sus ojos vuelven a centrarse en mí y sonríe, y me dice “Y eso que apenas te estoy tirando unos adelanticos porque voy a lanzar este proyecto a finales de septiembre”.
Sueño carnavalero
La soberana tiene claro que la responsabilidad dispuesta sobre sus hombros es grandísima. De igual manera, ella está dispuesta a asumir el reto que estuvo esperando toda su vida con la sonrisa y el entusiasmo que siempre la caracteriza: “Desde muy pequeña llevo el carnaval en la sangre, este ha sido el sueño de toda mi vida. Así que quiero que toda Barranquilla sepa lo comprometida que estoy con este proyecto”.
La alegría, el compromiso y el amor por su gente y sus tradiciones le desbordan de cada poro a esta barranquillera, quien a pesar de su apretada agenda, me recibió con una gran sonrisa en el rostro que nunca desapareció durante el encuentro. Se sentó a hablar de su Carnaval sin apuros ni urgencias, a pesar del constante recordatorio de su jefe de prensa del poco tiempo que tenía para trasladarse a su próxima parada.
“Cada momento es importante. Cada momento es mágico y nunca va a volver a pasar. Es un momento que vas a estar con diferentes personas a las que de pronto no vas a tener la posibilidad de ver una vez más, porque hoy estamos aquí sentadas pero yo no sé si mañana vamos a podernos encontrar”. Ese es el argumento referido por Valeria para explicar por qué se toma cada evento, cada encuentro con el público con tanta alegría y entrega.
Es consciente de que ella se debe a Barranquilla, pues si bien representa a una figura importante del Carnaval, a éste lo hacen todos los habitantes. Por esa razón piensa continuar con el legado de su antecesora, llevar el Carnaval a la calle, al bordillo pues ahí es donde pertenece. “Yo quiero estar en cada rincón de mi ciudad, entregándoles el carnaval a todos, porque yo soy solamente una figura que lleva el carnaval pero en realidad el carnaval es de todos los barranquilleros y se los voy a hacer sentir: aquí todos somos protagonistas”.
Así es como desea que la recuerden, como la reina del pueblo. La reina alegre que le rinde homenaje a sus tradiciones, “Como una reina autóctona”. También tiene “por ahí otra cosita” que desea dejarle a la ciudad como recuerdo, “es algo que más adelante también se los contaré porque lo voy a sacar en un evento, pero te voy adelantando algo más o menos, es un personaje que lleva toda esa sabrosura que tenemos dentro.”
Como reina, Valeria desea enseñarle a Barranquilla a sentirse cada vez más apasionados y orgullosos de lo que tienen “porque cuando tú quieres lo que es tuyo, tú vas a querer que siga una larga trayectoria, así que si las cosas se me dan quiero dejar huella en este carnaval”.
